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Joanna Concejo, en Valladolid.
«Jamás me bastan las palabras, necesito el dibujo»

«Jamás me bastan las palabras, necesito el dibujo»

La ilustradora polaca Joanna Concejo participa en el II Vilustrado con una charla y un taller

Victoria M. Niño

Sábado, 23 de julio 2016, 13:08

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Es polaca, casada con un español y residente en Francia. Joanna Concejo lleva veinte años trabajando desde París pero cada vez más conectada con otros mercados como el italiano y el español, así como el de su tierra natal. «Se ha pasado la etapa disney en la que todo iba en esa línea y ahora se valora más la creación personal en estos países. La situación en Francia ha cambiado, ya no hay tanta variedad editorial, está más concentrada».

Concejo (Slupsk, Polonia, 1971) tiene una formación de dibujo clásico que ha determinado su enfoque. «En Bellas Artes trabajas con modelos, pintando al natural. Y eso perdura en mí, siempre necesito la realidad como referente. Aunque luego la transforme para contar lo que quiero, parto de un objeto real».

Objetos reales que traslada hacia una mirada casi surrealista, como muestra el dibujo que hizo para un plato de la firma de cerámica portuguesa Vista Alegre, una mujer cuyo cuerpo es una jaula que guarda mariposas. «Me gusta que el dibujo tenga varias capas de lectura. En el mismo plano lo que para los niños es divertido puede significar otra cosa para un lector adulto».

Centrada ahora en la ilustración, comenzó en artes plásticas con instalaciones o colaboraciones con una amiga ceramista. «Ella hacía la pieza y yo jugaba con lana y ganchillo para crear formas ilustradas que la rodeaban. Lo que siempre tengo en mente es contar algo, eso es lo que intento», explica Concejo que ha publicado en España tres álbumes en el sello OQO, Humo, Cuando no encuentras tu casa y Zimbo. Este último, con texto de Arturo Abad, fue elegido en Munich como uno de los álbumes más hermosos del mundo.

Ilustra textos ajenos y también propios. «Cuando son mis textos, puedo avanzar indistintamente con las palabras y los dibujos. Pero las palabras jamás me bastan, siempre tengo que añadir el dibujo. Sin embargo, el dibujo sí me basta. Tengo pendiente hacer un álbum sin palabras».

Álbumes sin edad

No se para a pensar la edad de su público. «No hago un álbum según la edad, no sabría. Tengo algo que explicar, lo hago a través de los dibujos y luego se lo doy al editor, que es quien tiene que afrontar hacia dónde digirilo. No sé hacer álbumes para niños ni para adultos».

Por eso le atraen los mercados más abiertos que no trabajan con tantos condicionantes. «Por ejemplo en Polonia se vuelve a los libros ilustrados bonitos. Crecen el número de editoriales que permiten al ilustrador dar su visión del texto con total libertad. Yo siempre he tenido la suerte de trabajar así, aunque cada vez lo hago más en Italia que en Francia». En 2008 apareció en el mercado italiano Il Signor Nessuno y desde entonces ha publicado regularmente allí. Su obra ha sido seleccionada en exposiciones en Bolonia, Corea del Sur y Portugal.

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