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Javier Angulo y Fernando Lara.
«La Seminci es un afán colectivo»

«La Seminci es un afán colectivo»

El jurado reconoce a la Seminci por su «aportación a la difusión del cine como disciplina creativa en relación con valores sociales y humanísticos»

Victoria M. Niño

Jueves, 6 de abril 2017, 12:28

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La Seminci cumplirá sus 62 ediciones con un reconocimiento más, el Premio Castilla y León de las Artes 2016. El acontecimiento cultural más destacado de la comunidad autónoma ha sido reconocido por su «brillante trayectoria y su aportación a la difusión del cine como disciplina creativa en relación con valores artísticos, sociales y humanísticos». Su actual director, Javier Angulo, defiende la labor del equipo que encontró, el buen hacer de sus predecesores y su aportación personal en los últimos diez años. Anuncia ya que no podrá recogerlo, el 21 de abril estará en el Festival de Teherán, «de donde el año pasado me traje tres películas y un director, y este año espero que sea también fructífero. Pueden recogerlo el presidente del Consejo rector, el alcalde Óscar Puente, o la concejala Ana Redondo».

¿Siente que este es el premio a su labor en la última década o a la historia de la Seminci?

No creo que se premien mis diez años al frente del festival sino a su trayectoria de 61 ediciones. Lo recibimos en nombre de todos los directores anteriores. Quiero recordar especialmente a Fernando Lara, que durante sus 20 años de trabajo situó a la Seminci en el mundo, a Frugone, a Carmelo Romero y Fernando Herrero. También a los gobiernos municipales anteriores y al actual que siempre la han apoyado. Es un premio colectivo que reconoce lo que significa Seminci.

Es este un reconocimiento propiciado por la Junta, institución sobre la que ha lamentado en público que dejara de ser uno de los principales patrocinadores.

Nunca ha habido problema. Desde mi llegada he trabajado para que la Junta esté cada vez más implicada. Hay un representante suyo en el Consejo Rector, que antes no había. Trabajamos con la Consejería de Cultura para los conciertos con la OSCyL en el Miguel Delibes. Gracias a la colaboración con Educación organizamos Miniminci con los colegios de Castilla y León. La aportación de la Consejería deAgricultura hace posibles los coctails y las jornadas del Cine&Vino. Cada vez hay más relación.Esa es una labor que me arrogo, podemos decir que durante diez años no ha habido problema. La Junta ha reconocido que somos la institución cultural más importante de Castilla y León según el Observatorio de la Cultura y la número 27 de 50 a nivel nacional, único festival en ese ránking junto con el de San Sebastián. Tenemos una buena relación que esperemos mejorar.

Este es un premio que reconoce a protagonistas del mundo del arte. ¿Gestionar la cultura es un arte?

Es un arte sí. La gestión de la cultura debiera ser una asignatura que enseñar a los españoles, cómo hacerlo cuando tengas el poder. Hay que gestionar para todos, la cultura no es un privilegio sino un derecha de los ciudadanos y un deber de los políticos satisfacerlo. La Seminci ha jugado siempre un importante papel social y cultural. Es una referencia en Castilla y León y en España. Es importante que atraiga a gente que quiere ver otro tipo de cine que no sea el de consumo comercial. Me siento honrado que se reconozca al colectivo que la hace posible.

¿Cómo es la relación de la Seminci con instituciones locales como la cátedra de cine (su fundador Francisco Plaza estaba en el jurado) o el resto de festivales en la región?

Reconozco mi labor para abrir el festival a al ciudad. Estando Paco Plaza en la Cátedra firmamos un convenio para colaborar con la UVA. También desde mi llegada existe una coordinación de los festivales de Castilla y León y asistí a la creación de la Federación de Festivales. La Seminci tiene que irradiar en Castilla y León. Creamos las secciones de Castilla y León en Corto y Castilla y León en largo. Hay una gala homenaje desde el año pasado que comenzó reconociendo la trayectoria de Francisco Regueiro. Este año se reconocerá la labor de otro castellano y leonés. Intento abrir la Seminci a las instituciones locales y de la comunidad para que sea algo más que esos ocho días al final de octubre. La Seminci es de todos y quiere acercar el cine a todo el mundo

¿Puede adelantarnos algo de la edición de 2017?

Hoy toca hablar del premio y de todos los implicados en él. Resaltar de nuevo al Ayuntamiento y al equipo de Seminci que en algunos casos llevan 30, 20, 15 años. Es un equipo que yo me encontré estable consolidado y que he mantenido. En este tiempo hemos pasado de 45.000 a 90.000 espectadores, de 450 invitados a 1.200, eso no lo podría haber hecho yo solo. La Seminci es un afán colectivo.

¿Es este un buen colofón para un último año marcado por la polémica del concurso de su plaza?

Los concursos son una figura que se está imponiendo en los festivales. No tengo problemas con ellos, lo que reivindico es que se hagan limpiamente, que los que tienen que juzgar a los candidatos sean profesionales y que todos los aspirantes tengan las mismas posibilidades.

El jurado de este galardón, que desde su edición en 2015 ha asumido también la antigua modalidad de Restauración y Conservación del Patrimonio, estuvo formado también por el historiador René Jesús Payo (Universidad de Burgos); la directora del Museo de Valladolid, Eloísa Wattenberg, y los periodistas Ruth Rodríguez (TVE) y Pablo Lago (El Mundo de Castilla y León).

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