El Delibes viajero, a través de la voz de Lorenzo

Delibes, un cazador descubre América fue la conferencia de Amparo Medina-Bocos que cerró este lunes las tres citas literarias del ciclo Valladolid, Tierra Capital del Español. La sala del Teatro Calderón recibió ya completo el patio de butacas a la profesora que «nos ha desentrañado a Delibes y a muchos más escritores, señaló Carlos Aganzo, director de El Norte de Castilla, con quien conversó después de su ponencia.

Si primero fue Vargas Llosa, después Cela, ha sido el novelista vallisoletano el protagonista de esta jornada organizada por El Norte en colaboración con la Fundación Miguel Delibes. El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, recordó, antes de dar paso a la profesora, la repetida lectura en su juventud de Diario de un cazador «porque aunque yo no lo era, me recordaba a mis tíos en Peñaflor de Hornija».

Amparo Medina-Bocos comenzó recordando que, salvo Los santos inocentes, es Diario de un emigrante «la única novela en la que Delibes sale de Castilla». Era su sexta novela y surgió de una estancia de tres meses en Chile, invitado el ya director de EL Norte de Castilla por el Círculo de Periodistas del país andino en 1958. «Delibes tenía 38 años, cinco hijos, y reconocimientos como el Nadal o el Premio Nacional. Poco antes de embarcar, le dieron el Diario de un cazador, recién publicado. Lo leyó en la travesía y así Lorenzo viajó con él. De tal manera, es importante esa circunstancia, que Delibes llega a Chile con la mirada desdoblada; la del reportero curioso y la del bedel cazador, que es Lorenzo».

Medina-Bocos fue citando las referencias a América en otros libros como La sombra del ciprés es alargada o Viejas historia de Castilla la Vieja. El público siguió atento el pormenorizado detalle de esta incansable especialista que no cesa de estudiar la obra delibeana.

Este martes se proyecta en los cines Broadway Los santos inocentes, la adaptación que Mario Camus hizo de la novela, a partir de las 18:30 h. La película estará seguida de un coloquio con Jorge Praga y Gustavo Martín Garzo.