Las vacunas antigripales se agotan en la región y Sanidad reserva las 60.000 que quedan para los mayores de 65 años
La insuficiencia de las 978.750 dosis adquiridas dejará sin inmunizar a la población sana y a algunas personas de riesgo o embarazadas
La demanda de este año ha sobrepasado la adquisición de vacunas antigripales de la Junta y también de las adquiridas por el Ministerio de Sanidad ... y adjudicadas a Castilla y León. Por ello, y ya gastadas las cerca del millón que se compraron, como solo quedan 60.000 dosis, Salud Pública las reserva para los mayores de 65 años. Así, previsiblemente desde el próximo 9 de diciembre, los centros de salud dejarán de vacunar a las personas que no son de riesgo; aunque la mayoría ya no lo hacía a la espera de inmunizar a la población sana solo si sobraban. Finalmente no se podrán vacunar todos los que lo deseen en la comunidad; aunque sí la mayoría de los que pertenecen a grupos de riesgo.
Habitualmente las campañas de vacunación sí permitían acceder a ellas a personas no marcadas como diana en la vocación de una cultura de protección general. Es la primera vez que ocurre que haya personas que tradicionalmente se vacunaban y este año haya sido imposible; salvo en algunos casos de trabajadores si su empresa ha puesto a disposición de los profesionales tal cobertura que favorece que haya menos bajas laborales. Además, en un primer momento y durante varias semanas no existía la posibilidad, como en años anteriores, de comprar la vacuna en una farmacia. No obstante, hace ya días que tal posibilidad está abierta.
Sanidad disponía de hasta 978.750 vacunas, entre las 620.000 adquiridas por la Junta y las 358.750 que podían llegar a ser distribuidas por el Ministerio de Sanidad, en caso de ser necesarias. Supone poder llegar al 40% de la población. Este año se han batido todos los récord.
La campaña no ha estado exenta de continuas críticas por no adecuarse las citas previas en el centro de salud para ponerse la antigripal con las dosis preparadas en el mismo y los pacientes han tenido que acudir reiteradas veces a su ambulatorio. Es más, algunos, incluso de riesgo, no han logrado finalmente su dosis.
La campaña arrancó el pasado 5 de octubre en centros residenciales de mayores y de forma generalizada para toda la población una semana más tarde, el 13 de dicho mes.Sanidad decidió adelantarla, tradicionalmente se inicia a finales de octubre, por coincidir con la pandemia de covid-19 y por el hecho de que algunos de los síntomas se pueden confundir con los del coronavirus y evitar así mayor presión asistencial aún en el sistema sanitario. Además no se le puso fecha final para favorecer que se vacunara cuantas más personas mejor. Fueron reiterados los anuncios de que no faltarían vacunas para todos y que solo había un problema de distribución por falta de neveras de gran tamaño en los centros de salud. Algunos hace días que no vacunan más que a población de riesgo, y ya ni siquiera se inmuniza a embarazadas u otras personas con enfermedades crónicas.
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