Castilla y León, la sexta con mayor demora para una intervención quirúrgica
La memoria del Defensor del Paciente revela que la comunidad es de las más denunciadas de España, con 702 casos y 39 muertes
«La excusa del covid-19 ya no cuela puesto que el sistema sanitario sigue sin ser idílico por la falta de recursos personales y ... materiales. La pandemia ha dejado al descubierto las vergüenzas del sistema nacional sanitario. Nuestra sanidad no da para más debido a que la inversión no es la adecuada». Es la conclusión última del informe de 2021 del Defensor del Paciente sobre sus actuaciones. El mismo revela que Castilla y León es la sexta comunidad más denunciada de España con 702 casos, de los cuales 39 han sido muertes.
La memoria de esta asociación analiza sobre todo las listas de espera quirúrgicas y la comunidad, desde este punto de vista, tiene una mala situación, la sexta peor con una demora media de 129 días, peor que la madrileña, la valenciana o la de Galicia, que suelen ser autonomías con muchos problemas en esta ámbito.
Es el punto más débil de la actividad asistencial regional, «con 37.319 personas» pendientes y, al igual que el pasado ejercicio, las cirugías que mayor retraso acumulan son Traumatología, Oftalmología y Cirugía General. Los valores están muy por encima de los números prepandemia, «por lo que para volver a la normalidad lo idóneo sería 30.000 pacientes en lista estructural con una demora de unos 90 días». De ahí, que la Junta, recoge el Defensor del Paciente, haya elaborado un Plan de Ordenación de Listas de Espera (POLE) con el objetivo de reducir las presiones asistenciales, pero hasta finales de 2022 «no podremos dar cuenta de su eficacia».
Por provincias, Valladolid con 211 casos es la de mayor número de casos, seguida de León (171); Burgos (110); Salamanca (80); Segovia (37); Ávila (35); Zamora (24); Palencia (22), y Soria (12).
Los asuntos que han llevado al ciudadano a presentar reclamaciones a través de esta organización «han aumentado en un total de 190 lo que supone una subida del 27%». Es la comunidad en la que más han crecido las cifras, «llegando a su máximo histórico y superando los 680 casos que recibimos en 2013».
Otro de los puntos débiles que recoge el informe es «la falta de médicos; prueba de ello se han tenido que anular consultas y pruebas diagnósticas ante la carencia de oncólogos, cardiólogos o radiólogos». Este problema tiene especial incidencia en el mundo rural, por lo que, considera que Sacyl «debe centrarse en llevar facultativos a los pueblos, pero para ello es prioritario efectuar una política que facilite la ocupación de plazas de complicada cobertura, es decir, habría que idear contratos con mejores retribuciones, más días de descanso y pudiendo alternar consulta y hospital». En otra vertiente, el Defensor del Paciente denuncia «el difícil acceso a las consultas de Atención Primaria; lo que ha saturado las Urgencias de gran parte de los hospitales, fruto de la nefasta gestión y el brutal recorte presupuestario por parte de la Junta de Castilla y León», critica.
A nivel nacional, la organización ha recibido un total de 13.156 casos (2.647 más que en 2020); de los cuales, 628 han sido con resultado de muerte (cien más que en el ejercicio anterior). De 2020 a 2021, se han incrementado en un 25% retrocediendo a cifras muy similares a las de hace una década, allá por 2011, cuando se registraron 13.010 casos.
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