La plantilla de Aciturri reclama a la empresa que renuncie a los despidos y prolongue el ERTE

La plantilla de Aciturri en la planta que la empresa aeronáutica tiene en Boecillo se ha manifestado esta mañana ante la Delegación del Gobierno en Castilla y León, en Valladolid, para reclamar la implicación del Ejecutivo de Pedro Sánchez en la resolución de la crisis por la que atraviesa el sector, que en la empresa burgalesa se traduce en un expediente de regulación de empleo de despido colectivo para 260 personas.

Cerca de un centenar de personas han sido la cara visible de la huelga convocada hoy en los tres turnos, dentro de una movilización a nivel nacional en todo el sector aeronáutico español, afectado por el descenso de las ventas de aviones a causa de la pandemia de covid-19.

El comité de empresa, que lleva negociando el ERE desde el 1 de septiembre y volverá a sentarse a la mesa el jueves, reclama su retirada a cambio de prologar el actual expediente temporal, un ERTE que ya afecta a la totalidad de la plantilla. «Existen alternativas, ya que estamos ante una situación coyuntural, y pedimos a la empresa que no se precipite y mantenga el ERTE», ha manifestado Juan Pablo Ruiz, presidente del comité, quien ha recordado que «la mesa sectorial ha anunciado que va a articular unas ayudas que ya no pueden demorarse más».

La posición de la empresa, según han explicado en la concentración, es de «enrocamiento». Ya ha prescindido del 18% de su fuerza laboral con la supresión de los contratos eventuales y rechaza por su coste la propuesta de la representación de los trabajadores para que se reasuman tareas externalizadas con personal de plantilla. «La gente tiene miedo», resume Ruiz al respecto del estado de ánimo de la plantilla, que ve cómo Aciturri puede convertirse en el primer caso de empresa relevante de la comunidad que pasa del ERTE al ERE.

Aciturri pretende despedir a 260 personas entre las factorías de Miranda de Ebro (Burgos) y Boecillo. El expediente afecta a 92 personas en la fábrica vallisoletana, 81 mano de obra directa y 11 indirecta, que suponen un tercio de la plantilla.

Entre los manifestantes, Alberto Carravilla aportaba una visión de conjunto: «Llegué hace 12 años a Boecillo y éramos 60. Ahora había llegado a casi trescientos, en unas instalaciones que prácticamente cada dos años recibían inversiones para su ampliación. La empresa iba muy bien y hasta los primeros meses del año ha estado dando salida a importantes cantidades de 'stock'. Ahora estamos en esta situación sobrevenida y pasajera y de la misma manera que se habla de prolongar los ERTES bonificados para la hostelería y el turismo, es momento de buscar alternativas no traumáticas».

Para Gonzalo Díez Piñeles, secretario general de la Federación de Industria de CC OO en Castilla y León, el Gobierno debe agilizar la puesta en marcha de la mesa del sector aeronáutico ya comprometida «y garantizar que las ayudas y las salvaguardas de empleo no se limitarán a Airbus, sino también a sus proveedores y empresas auxiliares». También ha lanzado un mensaje a la dirección de Aciturri: «Todo a lo que renuncie ahora la empresa y deje de hacer, otros pueden estar preparados para cogerlo cuando esto pase».