Miguel Paz: «El objetivo es que la gente trabaje»

-¿Con qué objetivos se creó Fuldefe?

-Consideramos que era una herramienta más útil para poner en marcha programas de formación y de intervención social dirigidos a colectivos en riesgo de exclusión, en general a personas desempleadas con más dificultades, especialmente haciendo hincapié en jóvenes.

-¿A qué personas se atiende?

-A personas desempleadas, aunque siempre se ha tendido a dar cierta prioridad al colectivo joven. También a otros como las personas con discapacidad y, en general, a personas desempleadas que parten de una situación de mayor desventaja como parados de larga duración o mujeres desempleadas.

-¿Los jóvenes necesitan más apoyo para incorporarse al mercado laboral?

-Sí, porque, precisamente por su juventud, requieren adquirir una serie de destrezas, experiencias y conocimientos que va proporcionando la vida laboral y el contacto con el mercado. Dado que ellos en ese sentido son principiantes, sí deben ser beneficiarios, a nuestro juicio, de un apoyo inicial más intenso.

-¿En qué programas trabaja la Fundación?

-Hay un bloque de programas de formación, que es formación de carácter integral y que viene acompañada, a su vez, de itinerarios de inserción y orientación laboral. Son talleres, cursos, programas mixtos de formación y empleo y talleres o acciones formativas. En ellos, se intenta incidir siempre en aquello que demanda más el mercado laboral. El otro bloque de programas es de intervención sociolaboral integral, donde se ponen en marcha más mecanismos de apoyo. Suelen venir acompañados con apoyos tutoriales o con la presencia de otras figuras como pueden ser pedagogos o psicólogos.

-¿Qué se busca a través de estos programas?

-La formación siempre tiene que estar vinculada a la posibilidad de inserción laboral y es lo que se busca. El objetivo, el fin último de la Fundación y del Instituto, es conseguir que la gente encuentre un trabajo porque el trabajo es realmente al final el principal instrumento que tiene cualquier persona de inclusión social, no solo ya para obtener unos ingresos, sino que muchas veces es la forma de romper ese círculo a veces de exclusión en el que puede estar alguien.

-¿Los usuarios de estos programas se encuentran con muchos problemas para encontrar trabajo?

-Cuando no han tenido ninguna experiencia, la formación que les damos o el paso por programas de intervención integral les ayuda, pero el paro, a nivel general en España, en el colectivo juvenil es especialmente alto. Es difícil y eso nos obliga a redoblar esfuerzos y ese es nuestro objetivo y nuestro empeño.

-¿Hay sectores a los que se dirigen más los esfuerzos porque tengan más demanda de empleo?

-Tenemos que ajustarnos a la realidad laboral de León y en ese sentido, el sector servicios es el que más oferta de empleo genera y el sector de la hostelería también. El sector de la teleasistencia o los ‘call center’ absorbe a un cierto número de personas desempleadas. No obstante, nosotros siempre intentamos también apostar, en la medida de lo posible, por yacimientos o por sectores más o menos emergentes como puede ser el de la eficiencia energética o el de la ciberseguridad. Por una parte, respondemos a lo que nos demanda el mercado local y por otra parte intentamos, en un mundo tan global y con tantos cambios, apostar por actividades profesionales que pensamos que son emergentes y que van a tener más salida, aunque sea a medio plazo.