Mañueco mediará entre las partes para buscar una salida viable a Siro

Trabajadores y regidores salieron de esos encuentros con el compromiso del máximo responsable de la Junta de mediar para sentar a la mesa a la empresa, la plantilla y las instituciones e intentar reescribir el capítulo del plan de viabilidad en el que ha encallado el futuro del grupo y que exige el fondo inversor para poner dinero en la firma agroalimentaria. Lo concretó a última hora de la mañana el consejero de Economía y Hacienda y portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, que remarcó la constatación de que hay una «voluntad de llegar a un acuerdo» por parte de los trabajadores y que existiendo la predisposición a negociar, van a intentar «cuadrar agendas» y concretar esas reuniones «cuanto antes». Horas más tarde anunciaron que esa primera reunión tendrá lugar este jueves, a las 17:00 horas, y será en la Consejería de Economía y Empleo, la de Fernández Carriedo. En estos encuentros se convocará a instituciones locales y también a representantes del Gobierno central.

A la puerta de las Cortes estuvieron mientras se desarrollaba la sesión plenaria más de un centenar de trabajadores que visibilizaron en Valladolid la crisis de un grupo señero en la comunidad, que ha llenado de pastas y galletas las estanterías de los supermercados españoles, principalmente de Mercadona.

Carlos Fernández Carriedo reconoció que el tiempo para desarrollar esta negociación es extremadamente ajustado. «Queremos que todo el mundo que pueda aportar algo esté, pero queremos que sea pronto porque la situación es crítica para la empresa», ha instado el portavoz de la Junta.

El inversor exige ese plan de viabilidad que recoge recortes salariales y otras medidas de ajuste, como el cierre en el plazo de dos años de la fábrica de galletas de Venta de Baños. El alcalde de esta localidad palentina, José López Acero, confió en que incluso esta decisión empresarial se pueda revertir. El regidor reconoció que salía más tranquilo de la reunión con el presidente de la Junta de como había entrado. Del encuentro con los también alcalde de Toro, Tomás del Bien, y Aguilar de Campoo, María José Ortega, los ediles salieron convencidos de que es posible encontrar una salida para Siro. También coincidieron los dos primeros en que por parte de la empresa había habido «falta de transparencia» a la hora de facilitar a los trabajadores información fiable sobre la situación del grupo.

«La voluntad que hay es que las fábricas sigan trabajando, pero los plazos son muy ajustados, estamos en una situación crítica, porque el inversor ha dado unos plazos muy ajustados, es una contrarreloj», ha manifestado el alcalde toresano, que ha censurado esta «falta de transparencia» de los responsables del grupo empresarial, que a su juicio ha contribuido a agudizar el conflicto.

El regidor de Venta de Baños ha pedido al presidente de la Junta fortaleza y una posición firme para encarar la crisis industrial de Siro. También a instituciones como la Diputación de Palencia. José López Acero, reconoció que salía más tranquilo tras sentarse con Fernández Mañueco, pero también hizo ver la «premura de tiempo» y lo «muy delicado» de la situación. El alcalde de Venta de Baños lamentó que no se hayan tomado medidas con anticipación y que haya sido necesario «dejar de producir y no pagar los sueldos de mayo para que se esté tomando conciencia» de la situación que puede llevar al cierre de plantas y la pérdida de empleos. «Hay familias en las que el matrimonio trabaja en Siro», apuntó López Acero.

«No nos rendimos», remarcó María José Ortega, que es la alcaldesa de la localidad en la que los trabajadores sí habían respaldado el plan de competitividad presentado por la empresa tras negociarlo. Ortega explicó que la «comunicación sí ha sido fluida» en el caso de Aguilar de Campoo, llamó a sentarse a negociar, lo que implica que «ambas partes» renuncien a algo «para que el futuro no sea lo que es ahora, que se prevé negro». La localidad ya vivió en el pasado la crisis de Fontaneda, que solventó en buena medida el desembarco de Siro en la localidad galletera.

El plan de viabilidad planteado por Siro fue aprobado por la plantilla de Aguilar de Campoo y rechazado por las otras factorías. Este es el punto de partida en este momento para voltear la situación. Los representantes de los trabajadores en los comités de empresa de las plantas de la comunidad expresaron su disposición a sentarse de nuevo a negociar el plan de viabilidad de la compañía y poder salvar los 1.500 puestos de trabajo que están peligrando tras paralizar las producciones la empresa y dejar de pagar salarios.

Carlos Fernández Carriedo defendió las gestiones de la Junta con la empresa, los trabajadores, distribuidores y acreedores. «Somos conscientes todos de que hace flata ese acuerdo de competitividad», remarcó el consejero popular.

Mañueco estuvo acompañado por consejeros de la Junta en esas reuniones. Fuentes del Gobierno autonómico confirmaron la presencia del consejero de Agricultura y el de Industria, Gerardo Dueñas y Mariano Veganzones. Son los departamentos a los que directamente atañe la crisis industrial de Siro, especialmente al último, y se trata de dos áreas gestionadas por Vox. En la práctica, quien asume el timón para intentar llevar a buen puerto la negociación es el presidente Mañueco y quien asume la agenda de reuniones y da las explicaciones, el consejero portavoz. En resumen, la parte PP de la Junta.