Los inspectores de Trabajo van a la huelga por primera vez

Un grupo de inspectores acudió el lunes a la rueda de prensa que daba la ministra de Trabajo en torno al informe sobre el salario mínimo para «hacer un último intento» de desconvocatoria. Mantuvieron una reunión con la Secretaría de Estado de Empleo y Economía Social en la que, según explican, «se puso de manifiesto que el ministerio no cuenta aún con cosas nuevas, en donde el Gobierno insiste en esperar hasta el 31 de diciembre y en donde todo parece que debe florecer ese día a pesar de llevar esperando año y medio».

«Estamos hablando de acuerdos firmados el 7 de julio que no se han cumplido, lo que contribuye a definir un ambiente de tal incertidumbre para la Inspección de Trabajo y Seguridad Social que, aunque solo sea por responsabilidad, lo único que cabe es mantener la convocatoria de huelga», señala Rafael Prieto, portavoz en la comunidad. «Estaba recogido un aumento de personal, pero también otras cosas igualmente importantes, como la puesta en marcha de una estructura organizativa para solventar la paupérrima situación de medios y recursos, así como una mejora salarial por las nuevas funciones».

Los inspectores alertan de que «no hay opositores para cubrir las plazas vacantes» porque «las condiciones laborales y salariales son mejores en otros cuerpos del Estado», a los que incluso se marchan algunos efectivos después de tener puesto y haber conocido el estado de la Inspección«, añade Prieto, quien asegura que «hay presupuesto para absorber todas las modificaciones y parece que Trabajo tiene un litigio con Función Pública que prolonga la parálisis«.

En Castilla y León, donde existe «un déficit estructural importante», no hay por ejemplo departamento de Informática, denuncian, lo que dificulta su labor y resta recursos a la vigilancia. «Después cuando por desgracia fallece un trabajador en un accidente laboral todos nos acordamos de la Inspección de Trabajo, pero para evitarlo hay que empezar por hacer algo ahora», afirma Prieto.