El impacto de la covid recorta un tercio las ventas del sector del automóvil de Castilla y León en el exterior

El impacto de la pandemia y la consiguiente paralización de la cadena de producción del automóvil durante casi dos meses, desde las fábricas a los concesionarios, pasando por la industria de componentes, se ha traducido en un descenso semestral de casi el 32% en las exportaciones del sector regional –hasta 2,223,3 millones de euros–, si bien en junio se redujo a menos del 5%.

El desconfinamiento y la paulatina recuperación de las ventas, más en Europa que aquí, han permitido retomar el ritmo productivo en las plantas españolas. El resultado en el caso autonómico es dispar y mientras unas como las de Renault, o Lingotes Especiales, han ido restituyendo los puestos de trabajo con la fabricación aún por debajo de las cifras anteriores, en otras como Iveco persisten los ERTES.

Desde la patronal de fabricantes, Anfac, confían en la puesta en marcha del Plan Renove para mejorar las perspectivas de ventas en los próximos meses. Esto provoca cierto aumento en la fabricación, todavía inferior a la de los mismos meses de 2019.

«La exportación de vehículos crece por encima de la producción, lo que da muestra del relativo mejor comportamiento de los mercados exteriores frente al mercado interno. Aunque todos los mercados europeos aún no equiparan sus ventas con las del año pasado (con la excepción de Francia), sí que están minorando las caídas», explican.

El comercio exterior de la región alcanzó en junio 1.371 millones, la cifra más alta en lo que va de año, por encima de las registradas en los meses pre-covid. Incluso fue el 2,8% superior a la del mismo mes del año anterior. Según los datos de la Dirección General de Estadística, en los seis primeros meses de 2020, las empresas de la región vendieron en el extranjero 6.655 millones de euros, lo que supone un descenso interanual del 16,3%, inferior al de las importaciones, que se situaron en 4.702 millones tras decrecer el 26,4%.

El golpe de la pandemia en el sector del material de transporte coloca su cuota de participación en el global de las exportaciones regionales en mínimos del 33%, si bien en junio se recuperó hasta el 40,5%. La caída que sufre en las ventas no tiene igual en el resto de empresas. La siguiente bajada semestral es del 20% entre las del sector del plástico, parecida a la que sufren las empresas de manufacturas metálicas. Casi el 15% descienden las ventas de las empresas que trabajan la piedra, yeso y cemento; y cerca del 10% las de maquinaria y material eléctrico.

Encajan mejor las dificultades las industrias del sector químico, que ven crecer las ventas el 15%, y las de animales y sus productos, con más del 5% de incremento. En junio, los mejores resultados fueron para el sector químico, con el 35% de alza;y para los productos vegetales y las industrias alimentaria, con crecimientos anuales superiores al 26%.

Las exportaciones, como después del crac de 2008, pueden volver a ser fundamentales para la recuperación. Al identificar «diez palancas estratégicas aceleradoras de la actividad empresarial competitivamente sostenible», la patronal regional, Cecale, anima a los empresarios a buscar nuevos mercados exteriores que permitan mantener el tejido empresarial y garantizar la supervivencia del empleo directo e indirecto. Ve preciso modernizar y reforzar los instrumentos de financiación de las exportaciones; atraer firmas punteras y competitivas para Castilla y León e incrementar la participación regional en las licitaciones internacionales.

Así las cosas, las provincias de Valladolid, Burgos y Palencia se mantienen como las de mayor volumen de ventas al exterior en los seis primeros meses de 2020, con participaciones del 35,9%, 22,6% y 17,1% sobre del total autonómico. Dos de las menos industriales, Segovia (56,7%) y Salamanca (40,7%), fueron las que experimentaron los mayores incrementos, mientras que los mayores descensos se dieron en Palencia (31,9%) y Valladolid (28,4%).