CC.OO. cree que la falta de seguridad estuvo en el origen del incendio de Composites Avanzados

El sindicato Comisiones Obreras (CC.OO.) cree que el incendio que sufrió la fábrica de Composites Avanzados en Arévalo el pasado 29 de octubre podría ser consecuencia, entre otros factores, de la falta de medidas de seguridad y la ineficiente labor preventiva que el sindicato venía denunciando desde julio de 2012. Se trata de «situaciones realmente graves» de una empresa que, según el secretario provincial de esta organización, Óscar García Barroso, estaba «instalada en la más absoluta piratería».

Esas «vulneraciones sistemáticas» de los derechos de los trabajadores en materia de seguridad incluyen: sustancias químicas manejadas por los trabajadores sin protección, filtros de las cabinas de repaso que no se cambiaban, espacios sin aislar, suelos no antideslizantes y temperaturas extremas en el centro de trabajo, entre otros incumplimientos. La primera denuncia ante la Inspección de Trabajo tuvo lugar el 25 de julio de 2012, solo unos meses después de que la planta se trasladara de Ávila capital a Arévalo.

Un foco anterior

De hecho, aseguran que en un cabina de manual, en marzo de este año, se produjo un incendio muy similar al de la semana pasada, un incidente que se intentó ocultar a los sindicatos. Desde CC.OO. se avisó en varias ocasiones de la que un accidente así se podría volver a repetir, pero la empresa se limitó a acusarles de alarmistas. Sí agradecen la «iImplicación directa y muy positiva» de la Inspección de Trabajo.

«Estaban envenenando a los trabajadores», denuncia García Barroso, quien asegura que se registró un índice de exposición al estireno, un componente químico cancerígeno, siete veces mayor del límite establecido legalmente. Están estudiando que medidas jurídicas van a llevar a cabo a partir de ahora para «defender los intereses» de la plantilla de esta fábrica.

La planta cuentan en la actualidad con una plantilla de 36 trabajadores, ya que, según CC.OO., se han ido «deshaciendo» de aquellos empleados que alertaban de las deficiencias. De hecho, aseguran que existieron «presiones» a los delegados sindicales, ya que en julio de 2013 fue despedido un representante de esta organización.

Creen que Composites Avanzados, empresa que se dedica a la fabricación de piezas de fibra de poliéster que se utilizan para la fabricación de contenedores, ha recibido ayudas públicas de distintas administraciones. De hecho, sospechan que el cambio de sede de Ávila a Arévalo vino motivada por las subvenciones, aunque en CC.OO. no tienen datos concretos sobre este asunto.