La alcaldesa de Pastores cambia la bandera de España por la Republicana y la Guardia Civil la retira

La alcaldesa socialista en el ayuntamiento de Pastores, Pilar Salazar, decidió ayer cambiar la bandera oficial, la del Reino de España, por una tricolor de la II República en el marco de una «concentración simbólica» que se celebró la mañana del domingo en esta localidad de apenas 40 habitantes.

Según un comunicado del grupo Republicanos Ciudad Rodrigo, del que es portavoz la citada alcaldesa, esta acción es una manera de «reivindicar la necesidad de un cambio de régimen ante los abusos de poder que se están produciendo por parte de las administraciones públicas y en particular contra la recién aprobada ley de reforma de las administraciones locales que es en definitiva, el acta de defunción de los pequeños ayuntamientos y supone el fin de la autonomía municipal y de los bienes comunales». Precisamente, ayer en Madrid, también se desarrolló un encuentro de cargos públicos organizado por la Junta Estatal Republicana (JER), por lo que se aprovechó para hacer coincidir la fecha.

La intención era que esta enseña permaneciera durante dos días en la fachada del ayuntamiento de Pastores, un ayuntamiento formado por tres concejales, dos del PSOE y uno del PP. Sin embargo, minutos antes de las 22 horas, la Guardia Civil procedió a retirar la bandera. En la mañana de hoy lunes se ha vivido un nuevo capítulo al instar la propia Guardia Civil a la alcaldesa a izar la bandera oficial.

Las reacciones a este suceso no se hicieron esperar y así Juan Luis Cepa, secretario de los socialistas en la comarca de Ciudad Rodrigo, declaró a Efe que «esta alcaldesa no nos representa», recordando que la edil dejó de ser militante de este partido.

Cepa tiene previsto ponerse en contacto con los servicios jurídicos de la Diputación de Salamanca para conocer si la regidora ha incurrido en algún tipo de ilegalidad, y ver la posibilidad de que deje de representar al PSOE en ese municipio .

En caso de que existan «consecuencias penales», ha advertido Cepa, pedirán «su dimisión».

El día que se canonizaban a 500 mártires de la guerra en Tarragona, Salazar se manifestaba junto a otros dos compañeros a las puertas de la Catedral de Ciudad Rodrigo para recordar, según ellos, «que también hay mártires del otro lado».