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Nuevo motor que se fabricará en Valladolid. / EL NORTE
El nuevo motor de gasolina para Nissan y Renault se fabrica ya en Valladolid
automoción

El nuevo motor de gasolina para Nissan y Renault se fabrica ya en Valladolid

El propulsor, que emite menos CO2, se montará en los coches de la gama Megane y ha supuesto una inversión de 42,8 millones de euros

JULIO G. CALZADA

Martes, 17 de marzo 2009, 12:28

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La Factoría de Motores de Renault de Valladolid se ha hecho finalmente con el acuerdo para la fabricación del primer motor que montarán los coches producidos por la alianza Nissan-Renault, un proyecto diseñado por ingenieros de las dos multinacionales que, por el momento, se montará en vehículos de toda la familia Megane y que previsiblemente también utilizarán tanto coches de la marca japonesa como de la empresa gala, dado que se trata de un nuevo concepto de propulsor con emisiones de CO2 más reducidas que los actuales motores de gasolina y además, capaz de conseguir mayores potencias con menores consumos y un tamaño más pequeño.

Del nuevo motor -denominado H4J, aunque se comercializa con el nombre TCe 130- podrían producirse más de 150.000 unidades al año. Saldrá de las líneas de la factoría vallisoletana de Motores de forma simultánea a los otros dos modelos que se montan en estas mismas instalaciones: el motor de ciclo diésel K9K, del que se fabrican más de 600.000 unidades al año en Valladolid y el otro motor de gasolina, el K4, con una cadencia de fabricación similar a la del nuevo H4J.

La compañía informó ayer de que han sido más de 25 meses de trabajo de investigación y aplicación los que han permitido el inicio de la fabricación. La cadena en la que se fabrica el TCe 130 comenzó a montarse en el mes de junio, además de las líneas complementarias para el cigüeñal y de cárter. De manera que, durante estos meses, se han fabricado ya varios cientos de estos motores que han viajado hasta Francia para instalarse en algunas de las primeras unidades del nuevo monovolumen Megane Scenic, que se presentará en breve. Renault destacó a través de una nota de prensa que se trata de un proyecto «eminentemente multicultural, en el que han intervenido ingenieros de España, Japón, Francia y el Reino Unido. Se trata de un nuevo producto que, por primera vez, se ha diseñado entre Nissan y Renault y el sistema industrial de ambos».

En la elección de la factoría vallisoletana para hacerse cargo de esta producción ha pesado mucho «su experiencia y profesionalidad», afirma la compañía, lograda tanto con el motor de ciclo diésel K9K como con el motor de gasolina K4, «así como la posibilidad de reutilizar y adaptar la maquinaria de otras fábricas de la alianza. Otra clave para su elección ha sido la capacidad de optimización y flexibilización de sus líneas de fabricación», aclaró la empresa.

En la puesta en marcha del proyecto se han invertido 42,8 millones en tres nuevas líneas de montaje. En concreto, se dispone para esta instalación de una superficie de 4.500 metros cuadrados, con una capacidad de producción de 645 unidades diarias, lo que significa 215 motores por cada turno de trabajo. Desde la empresa indicaron que no existen previsiones, ya que la cifra de producción se ajustará a las peticiones del mercado.

Coste de mantenimiento

Lo más novedoso de esta nueva producción vallisoletana será el efecto de su cámara de combustión, que asegura una mayor homogeneidad en la mezcla de carburante y por tanto, una combustión más efectiva. Renault recordó que se han incluido mejoras que reducen significativamente el coste de mantenimiento, como el uso de una cadena para la distribución, en lugar de una correa, lo que evita su sustitución.

Fuentes sindicales recordaron ayer que la empresa se ha limitado a «la presentación del acuerdo de fabricación -que es una buena noticia-, pero no puede venderse como una novedad, porque era algo programado desde el año 2006», puntualizó Unai Hernández, de CGT. En términos similares se pronunció Pedro González, delegado de UGT en Renault, quien apuntó que no supone «un incremento de cargas de trabajo para las factorías de Valladolid».

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