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Villar, el pasado 30 de octubre, junto a Ángel Félix./ MIGUEL Á. SANTOS
Villar: «Sergio Asenjo tenía el puesto bien ganado»
REAL VALLADOLID

Villar: «Sergio Asenjo tenía el puesto bien ganado»

El portero paraguayo permanecerá hoy al margen del grupo para evitar problemas por una contractura

ARTURO POSADA

Miércoles, 10 de diciembre 2008, 02:18

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«No soy de hacer mucho teatro», explicó ayer Justo Villar, el nuevo portero titular del Real Valladolid tras la desgraciada lesión de Sergio Asenjo. El paraguayo debutó en Liga y dejó una duda flotando en el aire: ¿se tiró en los instantes finales para impedir un saque de banda rápido de Osasuna o realmente padecía una dolencia? Una ecografía despejó dudas: el arquero sufre una contractura en el bíceps femoral de la pierna izquierda. No reviste gravedad, pero puede preceder a una rotura de fibras si el músculo se expone a intensos esfuerzos. Los médicos han decidido que se mantenga hoy al margen en la doble sesión.

«Yo no tenía intención de cortar la jugada de Osasuna. Sabía que si volvía a pegarme una carrera se iba a agravar lo que había sentido. Entonces me tiré y pedí auxilio médico», recordó.

Justo Villar se ha convertido en la nueva referencia para la portería. Le llega el turno de demostrar sus cualidades y, algo más complicado, tratar de que el equipo (y el público) no eche de menos a Sergio Asenjo. «Yo quería tener minutos, pero lastimosamente se ha dado una situación que uno nunca desea: que Sergio se haya lastimado y de la forma que fue. Lo importante ahora es que yo esté preparado para suplantarlo y tratar de que no se le extrañe demasiado», incidió.

Hasta el retorno de Asenjo, y si no hay sorpresas, Villar ocupará la portería blanquivioleta. «Ya veremos lo que pasa cuando vuelva. Intentaré trabajar al máximo. Creo que Sergio tenía el lugar bien ganado. Estoy seguro de que tendrá la oportunidad nuevamente», añadió.

El debut de Justo Villar en la Liga coincidió con la sorprendente remontada del Real Valladolid en Pamplona. «En el descanso lo veía un poco negro. Apenas comenzada la segunda parte y con el 3-0 resultaba todavía más complicado. Yo estaba tranquilo porque sabía que no podía haber hecho mucho más en los goles. No estábamos para remontar y era difícil. Pero lo intentamos y logramos un resultado que pocas veces se da [3-3]. En el fútbol no hay que perder nunca la fe».

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