El club suma 309 abonados tras el partido contra el Atlético

La campaña de abonados no se cierra nunca. Todos los años continúan llegando nuevos socios casi hasta final de temporada. Aficionados que cambian de ciudad a mitad de temporada, recién nacidos que llegan con el carné bajo el brazo... El goteo es constante, aunque el grueso de esos abonos tardíos se realiza entre la primera y la segunda jornadas de Liga en casa. El sábado, 252 personas sacaron su entrada como incidencia en las taquillas. Ese día ya no era posible obtener el carné, por lo que se saca la entrada y su precio se descuenta después del coste del abono. El lunes, el club registró 202 altas. Ayer se sumaron otros 107 aficionados.

Con estas cifras, el Real Valladolid ha alcanzado los 16.610 abonados, y muy probablemente alcance y supere la cota de los 17.000 antes de recibir al Almería el próximo miércoles.

Una cifra que, a día de hoy, supone la cuarta mejor en toda la historia del club. La tercera, algo distante, se sitúa en los 17.578 de la temporada 1996-1997. El reto ahora es rebasarla.