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Marcos se refresca durante la sesión de entrenamiento de Real Valladolid./ A. POSADA
Marcos espera a los proscritos
REAL VALLADOLID

Marcos espera a los proscritos

El capitán confía en que el club lleve lo antes posible a Cifu, Alexis y Capdevila a la concentración de Holanda

ARTURO POSADA

Viernes, 1 de agosto 2008, 03:13

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El Real Valladolid hizo detonar una bomba antes de desplazarse a los Países Bajos. Tres jugadores, Alexis, Cifu y Capdevila, no viajarían con el resto de la plantilla a Mierlo para que entendieran una dolorosa realidad: no entran en los planes de Mendilibar. Ya en Holanda, la plantilla comenzó ayer a trabajar sin los tres jugadores, que siguen en Valladolid. Alberto Marcos, el gran capitán blanquivioleta y una de las voces con más peso en el vestuario, trató de analizar la situación. El capitán confía en que los tres desterrados lleguen pronto a la concentración.

Marcos descartó que el grupo se haya roto como consecuencia de la medida. «En absoluto. Son compañeros nuestros y el asunto que tengan con el club nos duele porque todos podemos estar expuestos a esa situación. Pero el grupo no se está quebrando. Seguramente el club los traerá aquí cuando pueda. Si como veterano puedo ayudarlos, lo haré».

Marcos asume la decisión de la dirección deportiva y entiende algunas de las explicaciones que ha ofrecido el Real Valladolid. «Hay cosas que no se pueden evitar. Para la pretemporada había unos billetes. Al final entra un chaval joven porque piensan que tiene proyección (Aridane) y yo en ese tema no entro. Es normal que si no hay billetes se queden allí los que, a priori, no cuentan. Pero como hay soluciones se va a tratar de que vengan lo antes posible. Así me lo ha comunicado el presidente», desveló el capitán al término de la sesión matinal de ayer junto al hotel Carlton de Brug.

Los planes del club, sin embargo, no parecen haberse apartado ni un milímetro de los previstos inicialmente. Alexis, Cifu y Capdevila se encuentran en la recámara. Son jugadores que siguen teniendo contrato en vigor con el Real Valladolid y están a disposición del club. La idea, repetida ayer, tiene más que ver con las necesidades del grupo que con el bienestar personal y profesional de los afectados. Los tres proscritos llegarán a Mierlo si Mendilibar necesita más efectivos. Los partidos de preparación y las exigentes sesiones de entrenamiento pueden obligar a echar mano de más futbolistas. En este supuesto, Cifu, Alexis y Capdevila tendrían alguna opción de llegar hasta aquí.

Sin embargo, la plantilla sigue presionando para que la unidad del grupo no se resienta. Capdevila señaló en Valladolid que se habían abierto algunas grietas en el colectivo. Marcos lanza un mensaje desde Holanda: «Capdevila puede estar afectado y lo entiendo. Volveremos a hablar con el presidente, que ya nos ha dicho que estarán aquí. Intentaremos sacar una solución para todas las partes. Lo principal es que el grupo esté unido. Llevamos dos años haciendo las cosas bien y eso es lo importante: que se sigan haciendo de la misma manera».

Los ropajes del mito

Al margen de la situación del trío de apartados, Alberto Marcos ejerció de capitán desde el primer entrenamiento en Mierlo y quiso dar ejemplo bajo el sol holandés. «Si yo puedo pelear al cien por cien, los jóvenes tienen que pararse a pensar. Cuando veía a un veterano correr más que yo, sabía que debía esforzarme. La gente que ha llegado a la plantilla viene con ilusión y ganas de demostrar al entrenador que ellos también son futbolistas», añadió el capitán.

Convertido en una leyenda blanquivioleta al batir el récord de partidos con la camiseta del Pucela, Marcos se quita los ropajes del mito cuando se entrena. «Sólo me acuerdo cuando estoy con los periodistas. En el día a día no sueles pensar esas cosas. Sí tienes en cuenta cómo ayudar por la condición de veterano. Lo que más me pesa es que con un gesto o una acción pueda perjudicar a la gente que viene de abajo», añadió.

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