Secciones
Servicios
Destacamos
ALICIA PÉREZ
Viernes, 27 de mayo 2016, 16:36
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
La Junta de Castilla y León está investigando la causa del ataque de un ejemplar del Centro del Lobo Ibérico de Robledo, en la comarca de Sanabria, al cuidador Carlos Sanz, que recibió ayer el alta hospitalaria tras sufrir heridas en los brazos, la cabeza y el cuero cabelludo. Los hechos se produjeron, según ha informado el delegado de la Junta en Zamora, Alberto Castro, sobre las 11 horas, cuando el técnico especialista de manejo, de 61 años, procedió a acercarse dentro de la jaula a una loba que estaba preñada y fue atacado por otro ejemplar macho, según ha precisado el delegado. Fuera de la jaula estaba la veterinaria del Centro del Lobo, de acuerdo al protocolo que establece que tiene que haber siempre dos personas para manejar a los lobos, concretamente un encargado de mantenimiento fuera de las jaulas y Carlos Sanz que se encontraba dentro.
El delegado ha asegurado que el ataque ha sido importante, pero que la pericia del cuidador y de la veterinaria permitió que las heridas no hayan sido de mayor consideración. «Hemos visto como se atendió y el mismo trabajador, que contaba con todas las medidas de seguridad que están establecidas en el protocolo, puso una posición defensiva para evitar, sobre todo, mordeduras en zonas vitales. El ataque ha incidido, sobre todo, en los brazos a la hora de intentar cubrirse el cuello y tiene mordeduras en el entorno de la cabeza y en el cuero cabelludo», manifestó sobre el experto cuidador de lobos durante más de 30 años, que desde ayer descansa en casa y se recupera de las heridas sufridas tras la atención recibida en el Hospital Universitario de León, al que fue trasladado en helicóptero.
Respecto a la razón del ataque, la Junta está pendiente de la investigación. «Es cierto que el hecho de que la loba estuviera preñada incide en el instinto del macho en este caso pero es cierto que el día anterior hubo un sabotaje, una acción vandálica en la cual se cortó con una radial el doble vallado y se abrió una puerta para soltar a los lobos», explicó el delegado sobre unos hechos que los técnicos creen como causa de que haya «un exceso de estrés por parte de los lobos».
Por este motivo, se incrementarán las medidas de seguridad en el centro con la extensión de la vigilancia que realizan las cámaras de seguridad a la mayor parte del recinto. También se solicitará la colaboración de la Guardia Civil para vigilar e intentar evitar este tipo de actos vandálicos que, según Alberto Castro, no tienen sentido. «Si algo pretende el Centro del Lobo es dar a conocer la especie y ponerla en valor. Lo que no tiene sentido es hacer un acto vandálico para soltarlos a un ambiente en el que nunca podrían vivir libremente porque ni siquiera serian aceptados por su propia especie», manifestó.
Ahora el protocolo sanitario establece que el lobo que atacó al cuidador tiene que estar al menos 15 días aislado. El jefe de la Unidad de Protección de Espacios, Jesús Palacios, explicó que Carlos Sanz, con el que hablaron en el hospital, no sabe por qué se produjo el ataque. «Lleva más de 30 años con lobos y nunca había tenido una situación como ésta. Es la primera vez que ha sufrido este tipo de ataque», explicó y apuntó a que piensan que podría haber una relación entre estos hechos y los actos vandálicos ocurridos un día antes, aunque de momento es una hipótesis de trabajo.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.