Juicio este lunes contra 11 dominicanos detenidos en Valladolid por narcotráfico

De los once acusados, J.C.J.G. y M.A.E.C. enfrentan, provisionalmente, a las penas más elevadas, ocho y 10 años, respectivamente, ya que se les aplica la agravante de pertenencia a grupo criminal-al segundo también reincidencia-, mientras que E.E.S.P, A.M.D, A.U.T, B.A.P.G. y L.R.M.T. se enfrenta cada uno a cinco años de privación de libertad, frente a los tres años y medio que la acusación pública pide para N.M.C. e I.E. de la R. o los tres años y un día para F.M.N. o los dos años que interesa para H.H.V.

En el caso de los dos primeros, J.C.J.G. y M.A.E.C, la petición acusatoria incluia su inhabilitación por espacio de cinco años y nueve años, respectivamente, para el ejercicio de la actividad de peluquero y hosterlero. Las multas para los once oscilan entre los 19.000 y los 3.000 euros, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

Esa es al menos la calificación provisional, si bien es más que probable que el juicio se celebre finalmente contra uno o dos de los procesados, al haber cerrado el resto un acuerdo con la acusación pública para obtener una rebaja de sus condenas a cambio de confesarse autores de los hechos.

La macro-operación 'Roava' culminó entre los días 5 y 7 de noviembre de 2015 y supuso la desarticulación de una organización criminal, el mayor grupo activo dedicado a la venta al menudeo de droga en Valladolid, según explicó entonces el subdelegado del Gobierno, Luis Antonio Gómez Iglesias.

En concreto, se realizaron nueve registros domiciliarios, ocho de ellos en Valladolid capital y uno en Mojados, además de otro en una peluquería y uno más en el bar 'Midas', ubicado en la calle Embajadores de la ciudad, frente a la Comisaría de la Policía Nacional en Delicias (calle Gerona). Precisamente, aquí se detuvo a M.A.E.C, titular del establecimiento, quien ya cuenta con una condena anterior por tráfico de drogas (fue detenido en abril de 2006).

El subdelegado del Gobierno destacó entonces la cooperación entre la Guardia Civil y la Policía Nacional, además de la colaboración de la Policía Municipal de Valladolid, que seguían dos líneas de investigación sobre sendos grupos de personas que confluyeron en un nombre y dio origen a esta operación conjunta.

Se da la circunstancia de que el nombre en el que confluyeron las investigaciones derivaba de la operación 'Yogur', llevada a cabo en julio del mismo año en cuatro provincias de la Comunidad, que se saldó con 28 detenciones y que permitió desmantelar en Roa de Duero (Burgos) el mayor laboratorio de speed descubierto hasta el momento en Castilla y León.

A partir de esta información se explotó esta operación que debe precisamente su nombre, 'Roava', al juego de palabras 'de Roa a Valladolid', según explicaron los responsables de Guardia Civil y Policía Nacional, el comandante Roberto Ferrero y Miguel Ángel del Diego, respectivamente.

La organización criminal, que distribuía sustancias en locales de ocio y clubes de alterne de Valladolid, estaba perfectamente estructurada y jerarquizada, con un individuo de iniciales A.M.D. como cabecilla.

Recibían la droga en sus distintos lugares de residencia y, una vez la mercancía en su poder, la repartían entre todos los integrantes del grupo para su venta y distribución inmediata al por menor en la provincia, de tal manera que nunca almacenaban cantidades apreciables en sus domicilios.

Durante el transcurso de la operación se pudo constatar también que vendían productos farmacéuticos ilegales (Sildenafil), principalmente en clubes de alterne y casas de citas, lo que ponía en «grave peligro» la salud de quienes se abastecían de estas pastillas, con efectos similares a la conocida Viagra.

Tras la identificación de los integrantes del grupo, sus domicilios o los lugares en que ocultaban la droga, se llevó a cabo la fase de explotación, en la que unidades de la Guardia Civil y Cuerpo Nacional de Policía realizaron de manera simultánea nueve registros domiciliarios en los barrios de Delicias y zona centro, un bar, una peluquería y un trastero, en un operativo en el que intervinieron los servicios de Policía Judicial y Guías Caninos de ambos cuerpos, el GRS (Grupo de Reserva y Seguridad) de la Guardia Civil y la UIP (Unidad de Intervención Policial) de la Policía Nacional.

Esta intervención se saldó con la detención de once personas, todas ellas integrantes del grupo delicuencial, por presuntos delitos contra la salud pública, falsificación de moneda y pertenencia a grupo organizado.

Los detenidos fueron: E.E.S.P, arrestado en la calle Cistérniga; A.M.D y A.U.T, en la calle Embajadores; M.A.E.C, titular del bar Midas detenido en la calle Gerona, con antecedentes por tráfico de drogas e incluso condenado; I.E.R, arrestado en la Avenida de Segovia; F.M.N, en la calle Granada; B.A.P.G, detenido en Laguna de Duero; y N.M.C, L.R.M.T, L.C.C, y J.C.J.G, detenidos en la calle Don Sancho. Los detenidos, cuatro de ellos mujeres, tenían edades que oscilan entre los 26 y los 48 años, y todos son de nacionalidad dominicana.

Al día siguiente se desmanteló un laboratorio 'indoor' de marihuana, ubicado en un domicilio de la localidad de Mojados, al que se accedía por una entrada oculta a través de un armario. De este laboratorio se surtía la organización y en Mojados se detuvo a H.H.V, de nacionalidad búlgara.

Además del menudeo de sustancias estupefacientes, la policía indagó la comercialización de billetes falsos -se incautaron 16.000 euros en billetes de 100 y 200-, que incluso utilizaron para comprar a un particular un vehículo para la organización.

El subdelegado del Gobierno subrayó la dificultad de la operación, dado que no se encontraba en los domicilios un gran «acúmulo de drogas» por las personas integrantes de la organización.

A pesar de ello, se incautaron 900 gramos de un tipo de sustancia mezclada, compuesta por heroína y MDMA (éxtasis), 100 gramos de cocaína, 42 plantas de marihuana y 100 gramos de cogollos ya elaborados y 500 pastillas de 'Sildenafil', junto a sustancia de corte, balanzas de precisión, dos armas cortas, cuatro vehículos (Hyundai Accent y Coupe, Alfa Romeo 147 y Mercedes C-200), además de una veintena de teléfonos móviles y numerosas tarjetas SIM.