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el norte
Jueves, 6 de abril 2017, 21:28
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Un despiste o una pequeña fuga. Nadie sabe por qué una mamá pato se decidió a abandonar su hogar en el Campo Grande de la capital vallisoletana para recorrer estos mundos de Dios en busca de alimento, agua o, tal vez, aventuras. Pero la fuga duró poco. La animada familia se encontró con dos agentes de la Policía Nacional, que decidieron acompañarles de vuelta al Campo Grande poniendo fin a la huida. Y, como hoy en día todo el mundo dispone de un móvil y está dispuesto a utilizarlo, alguien grabó la escena, vídeo que comenzó a compartirse por WhatsApp.
No es la primera vez que un grupo de patos cruza los límites del Campo Grande para conocer mundo. En abril del pasado año, una familia de azulones crió en el Inem de la calle Villabáñez y tuvo que ser trasladada al riachuelo del Campo Grande. Y, unos días antes, se escoltó a una pata y sus crías hasta el río.
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