Faruq de la Tata y Mora de Calderas, preparadas para el nacional de galgos

Gregorio Mediavilla y Sergio González Pariente, de Cuenca de Campos y Villaverde de Medina, respectivamente, llevan varios días en los que les cuesta pegar ojo. Desde que mamaran la afición de ser galgueros han soñado con este momento, con el de llegar al Campeonato Nacional de Galgos- Copa de Su Majestad el Rey con alguno de los perros que con tanto mimo y esmero cuidan cada temporada. Ahora lo han conseguido. Un sueño, su sueño. Y Faruq de la Tata, el macho de Gregorio Mediavilla, y Mora de Calderas, la hembra de Sergio González, pisarán el próximo sábado el corredero de Osuna (Sevilla) como clasificados para disputarse la prueba más importante de galgos en todo el país. «Estar aquí es lo máximo, aunque ya no ganemos, pero solo haber llegado es un sueño», comenta Gregorio Mediavilla. Su perro, Faruq de la Tata, está llamado a ser uno de los posibles campeones de España.

Cuando nació, Faruq tomó el nombre de uno de los protagonistas de la serie televisiva El Príncipe y le acuñó el apellido de La Tata, del restaurante del mismo nombre que este terracampino tiene en Cuenca de Campos. Pronto le vio las cualidades, así que el pasado año, tras ser eliminado por un gran perro en las previas, decidió reservarlo y presentarlo este año con más edad. «Es un perro de mucha codicia, mucha rapidez de salida y mucha resistencia, porque ha corrido liebres de 2,55 minutos. Es, en definitiva, un perro muy completo, porque por lo general las perras suelen ser más constantes y los perros si no tienen codicia se paran antes, pero éste lo tiene todo», explica su dueño, Gregorio Mediavilla.

Pese a ser vallisoletano, el galgo correrá por el club leonés El Rebeco, con el que este hostelero ya consiguió buena posición en las previas de hace dos años con La Romera. De esta vía materna, y descendiente del Chapapote, a Faruq ya le han salido varios compradores antes incluso de disputarse el nacional. Pero su propietario tiene claro que no quiere ganar dinero con él, sino «disfrutar de él». «Soy galguero de cuna, desde que tenía diez años he soñado con tener un perro así y para ganarme la vida tengo mi restaurante. Esto es un hobby», señala.

Esta semana viajará a Sevilla para que Faruq se vaya adaptando al terreno. Entre tanto, Gregorio Mediavilla lo entrena, prepara sus uñas y le da masajes para que el galgo esté en perfectas condiciones de cara al día 14. Los nervios, asegura, también se apoderan de él. Máxime sabiendo que recientemente robaron a una de las galgas clasificadas para el nacional de Castilla-La Mancha. «Hay que extremar las precauciones y tenerlo casi oculto para evitar los robos. En Sevilla, por ejemplo, lo tenemos ya todo preparado porque como corrió allí una de las pruebas del grupo mixto, ya hemos avanzado en la preparación», concluye.

Final con fiebre

Lo de Sergio González, el alguacil de Villaverde de Medina, ha sido casi llegar y besar el santo. Galguero desde niño, con la afición heredada y compartida con su padre, lleva solo dos años compitiendo para poder alcanzar el nacional. Y en diciembre, en la jornada posterior a Navidad, consiguió que su perra, Mora de Calderas, la que comparte en propiedad con Eloy Pariente, se metiera en el campeonato nacional después de que su oponente tuviera que retirarse por lesión. «Me hubiera gustado ganar de otra forma», confiesa, pero admite que Mora de Calderas tuvo una eliminatoria dura y con fiebre.

La preparación, dice, se viene así realizando en las últimas semanas. Ahora a Mora de Calderas le toca descansar para prepararse de cara a Osuna. «Ahora la llevamos a dar paseos, no tiene que hacer esfuerzos porque ya ha hecho bastantes para llegar hasta aquí». Al igual que ocurrió con Faruq, Sergio González vio rápido el pasado año que Mora de Calderas tenía cualidades suficientes como para competir con ella. Así que optó por reservarla para esta temporada. .

Al campeonato nacional de Osuna bajarán unos 1.500 vallisoletanos, según estiman desde la federación. El presidente, David Jiménez, destaca el «buen nivel» de los cinco galgos clasificados para disputar la Copa del Rey y confía en que las liebres «tengan tiro y sean corredoras» para facilitar las carreras a los galgos de Castilla y León, acostumbrados a liebres más duras que las del sur.

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