El dispositivo procesional para este año contará con cerca de 200 personas

Todo está listo para los próximos cinco días grandes que vivirá la capital vallisoletana, coincidiendo con las jornadas que van desde este Miércoles Santo al Domingo de Resurrección, en las que miles de personas estarán en las aceras y calles para seguir los pasos procesionales, escoltados por alrededor de 11.927 cofrades.

Unos días con máxima afluencia de público que requieren calles libres de vehículos, accesos cortados durante horas, alternativas para conductores y servicios municipales extraordinarios más allá de los que se fijan en los fines de semana.

«De hecho los servicios de la Policía Municipal superan incluso a los de las fiestas patronales de septiembre, de Nuestra Señora la Virgen de San Lorenzo. En Ferias, no se produce tantos cortes de tráfico por calles, y los actos tienen lugar en puntos muy concretos de la ciudad», explica un portavoz del Cuerpo, que vela por seguridad local y recuerda que «nadie se va de vacaciones».

La Concejalía de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento de Valladolid ha previsto que alrededor de 100 agentes, de una plantilla de 450, estén en servicio durante cada una de estas jornadas. La mayoría en intervenciones nocturnas, pero también los hay con concentraciones masivas de día, como son el Sermón de las Siete Palabras (Viernes Santo a las 12 horas en la Plaza Mayor), o la procesión del Encuentro de Jesús Resucitado con la Virgen (el domingo, a las 10:30 horas). De ellos, entre 35 y 50 policías formarán parte del circulo procesional estando cerca de cada escultura de Gregorio Fernández o Juan de Juni.

La movilización de la Policía Municipal en Semana Santa supera en horas las jornadas habituales diarias, ya que, en ocasiones, por necesidades del servicio deben de continuar trabajando por encima de las ocho fijadas en convenio.

Fuentes de la Policía Local señalan que la mayoría de los agentes piden de forma voluntaria trabajar en esos turnos, y si no se cubren entonces se recurre a refuerzos extraordinarios retribuidos.

Los agentes están encargados de la señalización en vía pública, lo que implica la colocación de vallas en los cruces que se cierran al tráfico. También se encargan de supervisar los espacios donde está prohibido estacionar al paso de las procesiones.

«Un servicio de la Policía Municipal ha colocado ya en los puntos de mayor tránsito carteles advirtiendo que no se puede aparcar. Si llegado el momento el turismo sigue estacionado, se tratará de localizar al propietario del mismo y, si no fuera así, se le desplazará horas antes hasta el aparcamiento disuasorio de la Feria de Muestras», explican desde la Jefatura Local, que añaden que esta retirada no es motivo de sanción.

El Jueves y Viernes Santo serán las dos jornadas en las que mayor servicio se prestará, ya que está justificado por la decena de procesiones diarias. Precisamente, este último día entre 50 y 80 agentes estarán pendientes de los actos procesionales.

Una de las novedades en las procesiones de este año será la ausencia de la Sección de Caballería de la Policía Municipal, que ha sido suprimida por el coste de mantenimiento por el actual equipo de Gobierno, surgido de las elecciones del 24 de mayo.

Sus yeguas ya no acompañarán, como lo venían haciendo desde la Semana Santa del 2013, a dos de las procesiones, como eran la de la Sagrada Cena, y la más vistosa de la General del Viernes Santo, que tiene lugar en la Plaza Mayor. Eran 14 caballos que en octubre pasado se entregaron al Ministerio del Interior.

26 bomberos cada día

Otro de los servicios municipales que estará atento a lo que pueda suceder esta Semana Santa es el del Cuerpo de Bomberos. Su dotación no se altera, pese a que pueden realizar mayor número de servicios.

«Estamos las 24 horas con la misma plantilla, alrededor de 26 personas que trabajarán dentro del operativo, en el que se incluyen los conductores», indican desde el Parque Central. La plantilla es de 162

Los servicios que se prestan, relacionados con la Semana Santa, implican salidas por colisiones de tráfico, no sólo en la capital sino también a 25 kilómetros a la redonda.

Finalmente, como es habitual en las grandes concentraciones, la Policía recuerda al público la necesidad de estar atento para evitar hurtos y robos. Por ello recomienda colocarse los bolsos cruzados, o tener los objetos, como teléfonos móviles o prendas, a la vista. Cada año, los agentes recuperan objetos extraviados que se depositan en la oficina para su entrega posterior.