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Camión de bomberos vintage.
Más de 300 coches clásicos convierten Valladolid en un salón del automóvil de época

Más de 300 coches clásicos convierten Valladolid en un salón del automóvil de época

La segunda edición del Valladolid Motor Vintage, organizada por El Norte de Castilla, congregó a miles de personas

santiago de garnica

Domingo, 21 de septiembre 2014, 18:52

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Si la primera edición del Valladolid Motor Vintage celebrada el pasado año fue un éxito, esta segunda ha sido la de la confirmación, con trescientos cuarenta inscritos, sesenta y ocho marcas presentes y con cerca de veinte mil espectadores. El poder disponer de todo el paseo Central del Campo Grande y de la Acera de Recoletos permitió una visión espectacular de los vehículos expuestos.

La fórmula del VMV, como ya se le conoce en los círculos de especialistas, funciona, pues el hecho de reunir vehículos de todo tipo y de todas las marcas, desde coches de competición a berlinas de lujo como Rolls o Bentley pasando por clásicos populares o camiones, sin olvidar las motos, incrementa el atractivo y lleva a que todo el aficionado al motor, o simplemente el curioso, encuentre su objeto de interés.

Además, en esta segunda edición, si bien repetían algunos de los asistentes a la de 2013, había muchas y espectaculares novedades. Entre estas, el coche más antiguo presente, un Peugeot 172 Quadrilette, un espectacular Auburn Speedster, varios Rolls de entre los años treinta y setenta, una colección de deportivos italianos Alfa y Lancia con aires de Dolce Vita o una larga serie de Minis de la primera generación junto a varios BMW de los años sesenta y setenta. Y motos, con preciosos ejemplares de la edad de oro de británicas como Norton, o la fascinante americana Indian y, por supuesto, las españolas Bultaco, Montesa o Sanglas. Y un tractor Ferguson, muestra del trabajo de otros tiempos en los campos de Castilla. Pero si les preguntan a los niños, les responderían sin vacilar que los camiones de bomberos traídos por un coleccionista segoviano.

Todos tenían dónde mirar, dónde recordar en este museo vivo.

Una fiesta para todos

El VMV es una cita del motor, donde se habla de magnetos, carburadores , cilindros y cilindradas. Donde se muestra con cariño y con orgullo el coche conservado, la moto restaurada, el camión salvado del olvido.Todos tienen cabida, da igual la marca, la época o el valor material: la pasión no entiende de eso y permite al dueño de un Rolls hablar con el conductor de un «seiscientos» compartiendo experiencias. Y también es una fiesta donde propietarios y público se animan para disfrazarse de acuerdo con la época de su vehículo, con el entorno que a cada uno le gusta más. Hippies, bomberos, militares en motos de la antiguaURSS, bomberos americanos o monjas en su «Dos caballos» conviviven en escasos metros. Es una forma de revivir el pasado, con nostalgia y buen humor. En el VMV todos tienen cabida y eso es la fórmula del éxito.

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