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Reparación de una pieza de artillería pesada SIAC, en el acuartelamiento del Pinar de Antequera.
El cuartel de Artillería del Pinar revisó más de 1.500 armas del Ejército de Tierra

El cuartel de Artillería del Pinar revisó más de 1.500 armas del Ejército de Tierra

Pistolas, ametralladoras y cañones de toda España pasan por esta unidad especializada

Jorge Moreno

Viernes, 19 de septiembre 2014, 12:09

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El Parque y Centro de Mantenimiento de Armamento y Material de Artillería (Pcmayma), que el Ministerio de Defensa tiene en el Pinar de Antequera, revisó y reparó durante el último año más de 1.500 armas, tanto ligeras como pesadas, pertenecientes en su mayor parte al Ejército de Tierra.

En esta instalación militar, cuya presencia en ese punto de la ciudad data de los años 30, se realizan tareas de mantenimiento de pistolas, fusiles de asalto, ametralladoras, lanzagranadas, morteros y otras piezas de artillería de campaña que utilizan las Fuerzas Armadas.

La importancia de este acuartelamiento radica también en que una de sus funciones es la reposición de aquellas piezas de armamento que tienen las diferentes unidades en España, y que con el paso del tiempo se deterioran. Se estima una media de entre 5 y 10 años a partir de los cuales es necesario sustituir las arandelas, gomas, tornillos, percutores, muelles y mecanismos que el armamento tiene, y que para reemplazarlos, en muchos casos, se deben de cumplir con las especificidades que marca la OTAN.

«Las piezas que se sustituyen vienen de empresas españolas, europeas o de otros países como Israel. También en algunos casos son fabricadas, cuando no hay un registro de propiedad industrial particular, por el personal del Parque, con el objetivo de ahorrar en costes», explica un oficial artillero.

Desde hace semanas, los especialistas del Pcmayma están reparando los morteros instalados en los vehículos que el Ejército de Tierra utilizó en Afganistán. Se trata de cuatro camiones ligeros cuya alta movilidad permitía responder a los ataques de insurgentes afganos. La unidad de Valladolid, en la que trabajan 191 personas (entre ellos 64 civiles) supervisa y envía pistolas, fusiles o ametralladoras al personal que está destinado en misiones internacionales, como la del Líbano.

En el taller de mantenimiento se pasan semanalmente revisiones de ametralladoras, fusiles y pistolas Parabellum asignadas a los miembros de las Fuerzas Armadas. Pero el personal del Pcmayma tiene otro cometido decisivo en la renovación del armamento por parte del Ministerio de Defensa.

«Cuando se compran nuevas armas, como los fusiles de asalto HK G-36, que han sustituido a los antiguos Cetme, nos encargamos de comprobar el material que el fabricante entrega, y se hace un chequeo del mismo para comprobar algunas de las piezas», explica un suboficial. De este modo, buena parte de los más de 50.000 fusiles HK han sido supervisados en los últimos años en Valladolid antes de enviarlos a acuartelamientos de toda España.

Respecto al armamento de campaña, el Parque de Artillería repara también piezas como la del último cañón SIAC 155-52 (Sistema Integrado de Artillería de Campaña) de la empresa General Dynamics.

Las intervenciones que más se realizan están motivadas por el uso de las armas en el campo y en las misiones internacionales. Los golpes del material y las deformaciones de las carcasas son las más comunes.

Sin polvorín y robotizado

El cuartel del Pinar de Antequera, que no dispone de polvorín desde hace décadas, y cuyas medidas de seguridad son extremas, cuanta con un almacén robotizado que indica el número de existencias que hay, para tratar de reparar las armas y entregarlas al terminar a la unidad correspondiente en menos de una semana. Alrededor de dos mil pedidos se hacen mensualmente, desde piezas para una pistola hasta componentes para armamento pesado, como pueden ser los obuses.

En el departamento de óptica se supervisan aquellas lentes de precisión que se utilizan para los fusiles capaces de acertar un blanco a más de mil metros.

Los cinco ingenieros con que cuenta el departamento de Ingeniería se encargan además de las certificaciones de calidad, riesgos laborales y de medio ambiente del cuartel. Estos especialistas realizan también informes periciales, por encargo de la autoridad judicial, cuando se produce un accidente o mal uso del armamento que determina la apertura de un expediente interno.

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