Google no ubica España

Google ha renovado su Tierra: su aplicación Earth se ha actualizado sustancialmente este lunes por primera vez desde su lanzamiento en 2005 (la presentación fue el sábado 22, coincidiendo con el Día Internacional de la Tierra). Y lo ha hecho con un buen puñado de novedades, entre las que destaca Voyager, una serie de colecciones temáticas que permiten recorrer distintos puntos del Globo sin despegarse de la pantalla y en las que España brilla por su poca representación.

Dichas colecciones, unas cincuenta de momento, aprovechan otra de las novedades del programa la recreación en 3D de la superficie terrestre, edificios y otras construcciones incluidos para viajar a distintos lugares de interés del planeta, los cuales vienen acompañados de una escueta reseña. Agrupados en cuatro categorías (Viajes, Naturaleza, Cultura e Historia), los temas van desde lo genérico (museos, zoos, aeropuertos o lugares patrimonio de la humanidad, por ejemplo) a otros más concretos como seguir los pasos de escritores famosos como Hemingway o Charles Dickens o descubrir las colonias de pingüinos más importantes.

Y aunque se trata de una primera versión y es probable que Google vaya incluyendo paulatinamente nuevas colecciones, la representación de España en la herramienta es, cuanto menos, escueta, con solo 14 localizaciones representadas en las distintas listas. Puede que no tenga muchos pingüinos, pero nuestro país cuenta con 44 parajes reconocidos como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco (el tercero del mundo, solo por detrás de Italia y China), de los que Google solo refleja cuatro (San Millán de la Cogolla, La Sagrada Familia, la catedral de Sevilla y la Alhambra). Museos españoles, de los 28 que destaca la aplicación en todo el mundo, solo recoge el Reina Sofía y el Museo Nacional dArt de Catalunya, y el mismo número de zoos. En otras, como las colecciones de arte urbano, jardines, y aeropuertos, no aparece ningún ejemplo español.

La web también ofrece recopilaciones creadas en colaboración con instituciones como la BBC, la NASA, el Instituto Jane Goodall y otras realizadas por curadores de contenido como el fotógrafo argentino Federico Winer, en las que España tampoco hace acto de presencia. Sin olvidar que esta nueva versión de Earth también propone recorridos virtuales por ciudades emblemáticas como París, Londres, Nueva York y en los que tampoco hay presencia de ninguna ciudad de la Península.

Otra de las nuevas propuestas de la aplicación de momento, solo accesible para el navegador de Google, Chrome es la posibilidad de viajar a un destino al azar, de entre los 20.000 lugares de interés que tiene en su base de datos. En una prueba realizada por este periódico, de 50 intentos, España solo apareció una vez con las cuevas de Altamira mientras que Francia se dejó ver en una docena de ocasiones.

Los bares de Hemingway

Como no podía ser de otra forma viniendo de la empresa de la que viene, Earth también ofrece un sencillo buscador, que además de la localización geográfica del lugar aporta información con puntos de interés cercanos. Pero con esta nueva versión se pierden algunas de las funciones del antiguo Earth, como la posibilidad de pasear por Marte o la Luna, la opción para crear mapas personalizados o las funcionalidades para expertos en geografía. Estas siguen estando disponibles en la anterior versión del programa, que todavía puede ser descargada.

Google hace un guiño al desarrollo sostenible y la ecología al mostrar, en los recorridos de Naturaleza, datos sobre la desaparición de ciertas especies, particularmente en las reservas africanas. Fruto de su colaboración con BBC, David Attenborough, el famoso naturalista británico responsable de infinidad de documentales para la cadena, presta su voz para descubrir los secretos de la fauna de algunos de los parajes más recónditos del planeta, en pequeños videoclips de un par de minutos.

Donde España sí tiene representación es, al menos, en el itinerario de bares de Hemingway. Junto a las parisinas La Closerie Des Lilas y Les Deux Magots, aparecen dos de las tascas predilectas del autor de El viejo y el mar: el café Iruña de Pamplona, popularmente conocido como el rincón de Hemingway, y el histórico Bar Chicote de Madrid, donde también se dejaban ver otras celebridades como Frank Sinatra, Grace Kelly o Ava Gardner antes de su conversión en museo en 1940.

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