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Diez consejos para mantener la salud bucal durante el tratamiento oncológico

Diez consejos para mantener la salud bucal durante el tratamiento oncológico

Conviene empezar con una revisión completa antes de la quimioterapia y seguir las revisiones para controlar la mucositis, la osteonecrosis y la disminución del flujo de saliva

linda ontiveros

Jueves, 3 de septiembre 2015, 14:10

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El tratamiento oncológico suele afectar la salud bucodental. Aunque no todos los pacientes sometidos a quimioterapia sufren las mismas complicaciones, debido a que la susceptibilidad al tratamiento es individual, y la toxicidad y la dosis de los fármacos empleados son distintos según cada protocolo, sí es recomendable que el paciente acuda a un odontólogo para evaluar su cavidad oral antes de comenzar la terapia. «La evaluación previa al tratamiento oncológico debe incluir una detenida exploración clínica y radiológica. Es importante identificar la existencia de focos infecciosos, caries y enfermedad periodontal», explica la doctora Rocío Cerero, portavoz del Colegio de Odontólogos de Madrid (COEM). «El estado de la cavidad oral antes de empezar el tratamiento oncológico, determina las posibilidades de complicaciones durante el tratamiento. Esta circunstancia es especialmente importante en los pacientes que van a recibir radioterapia en la zona de cabeza y cuello».

La quimioterapia afecta la salud dental mediante varios mecanismos, que dependiendo del tipo de tratamiento. La complicación más frecuente es la mucositis, que puede presentarse de forma leve, con un enrojecimiento de la mucosa oral que produce sensación de escozor e hipersensibilidad ante determinados alimentos, hasta casos graves, con úlceras e inflamación de las encías, que producen serias molestias para hablar y comer.

«Los fármacos que se utilizan en la quimioterapia van destinados a eliminar las células del tumor», explica la doctora Cerero. «En el tracto digestivo, sobre todo en la boca, las células también se dividen con cierta rapidez de forma natural y, por ese motivo, se afectan con la quimioterapia, pudiendo aparecer la mucositis. Aunque desagradable, desaparece unas semanas después de finalizado el tratamiento y no deja ninguna secuela».

Otro trastorno es la osteonecrosis, o necrosis del hueso maxilar, generalmente después de una extracción dentaria. «Se produce por efecto de la radioterapia (osteorradionecrosis) y también debido a determinados fármacos utilizados en el tratamiento de quimioterapia (osteoquimionecrosis), como los bifosfonatos», asegura la doctora Cerero. «El mejor tratamiento es la prevención: evitar las extracciones dentarias una vez comenzado el tratamiento oncológico».

Una tercera complicación es la disminución del flujo de saliva, ocasionada por la radioterapia de cabeza y cuello. «La falta de saliva predispone a la caries y gingivitis», afirma la doctora Cerero. «La sequedad se produce en el 100% de los pacientes que reciben radioterapia de cabeza y cuello. La intensidad va a depender de la dosis y el tipo de radioterapia. La saliva protege tanto a los dientes como a la mucosa, su falta tiene como consecuencia que se puedan producir más caries y la mucosa se encuentre más frágil».

Recomendaciones

Los diez consejos de la experta para proteger la salud bucal durante el tratamiento oncológico son:

1. La caries debe ser eliminada y, en los casos en que sea necesario, con un tratamiento de endodoncia previo.

2. La enfermedad periodontal es una infección que afecta a la encía y al hueso. Debe ser tratada porque puede empeorar con la quimioterapia y, a su vez, puede producir complicaciones.

3. Si se detecta algún foco infeccioso en relación con un diente o muela que no pueda ser eliminado fácilmente, debe procederse a la extracción de forma previa al tratamiento oncológico ya que si se realiza después, puede producirse una osteonecrosis maxilar.

4. Los dientes que tengan un pronóstico dudoso, se deben extraer sin demora.

5. Es recomendable utilizar un cepillo suave y pastas dentífricas no irritantes, como son, por ejemplo, las específicas para boca seca.

6. Durante el tratamiento, es conveniente acudir al dentista siempre que existan molestias en la cavidad oral y, si no, cada 3 o 4 meses.

7. Después del tratamiento, sobre todo en los pacientes que han recibido radioterapia, también es conveniente seguir un programa de revisiones frecuentes, de 3 o 4 meses, ya que debe seguir un programa preventivo riguroso a causa de la sequedad oral.

8. Los pacientes que hayan recibido fármacos que puedan producir osteonecrosis, también deben revisarse frecuentemente para evitar las extracciones.

9. La dieta es importante en estos pacientes. Debe ser una dieta variada, pobre en hidratos de carbono y rica en frutas y verduras. Además evitar los dulces y productos de bollería industrial.

10. Son convenientes los alimentos ricos en antioxidantes como el licopeno (presente en tomate y frutos rojos) y vitaminas.

«En el paciente en tratamiento oncológico la salud oral es muy importante, puesto que las complicaciones a este nivel pueden impedir la correcta nutrición y afectar de forma notable a su calidad de vida», afirma la doctora Cerero. «El objetivo es conseguir una buena salud oral y sin patología, previamente al tratamiento oncológico para evitar complicaciones futuras. Después del tratamiento sigue siendo muy importante conservar la salud. La ausencia de dientes, siempre que no afecte a la masticación o a la estética de forma importante, es secundaria».

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