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Riego en el Carracillo. M. Rico
Los regantes del Carracillo destacan las 600 alegaciones «a favor de la recarga»

Los regantes del Carracillo destacan las 600 alegaciones «a favor de la recarga»

Enrique Herranz sostiene que el proyecto «es bueno para la comarca» y «respeta el caudal ecológico» del río Cega

mónica rico

Cuéllar

Sábado, 19 de mayo 2018, 12:24

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El presidente de la Comunidad de Regantes del Carracillo, Enrique Herranz, insistió ayer en que el proyecto de mejora del regadío «será beneficioso para toda la comarca», por lo que lamentó «el enfrentamiento que se ha producido en estas últimas semanas entre nuestros conciudadanos», que atribuyó a «la difusión de informaciones sin fundamento, con un marcado carácter alarmista y quién sabe con qué intereses». Frente a las alegaciones en contra, esgrimió las «seiscientas a favor del proyecto, de empresas, asociaciones y particulares de todos los pueblos de la zona, lo que yo creo que aglutina más el sentir del 80% de la comarca del Carracillo y alrededores».

Herranz sostiene que la obra «respeta el caudal ecológico del río, y primero el abastecimiento a los pueblos y el uso del agua para consumo humano, lo que es prioritario». Subrayó que «no vamos a dejar seco el río» y que los regantes cogerán agua del mismo a partir de los 600 metros por segundo. «Vamos a coger entre un 15% y un 20%», explicó. «La mitad lo vamos a devolver al Cega», aseguró Herranz, quien insistió en que si hay unos defensores del medio ambiente, la fauna y la flora, «somos nosotros mismos», primeros interesados en que «haya una convivencia bastante fluida».

Respecto al lugar donde se realizará la obra de recarga, un área de pinares de Gomezserracín, afirmó que únicamente se recargará en los meses de invierno y se extraerá en los de verano, un proceso que «va a estar controlado tanto por la Junta como por la Confederación Hidrográfica del Duero». El presidente de la comunidad de regantes garantizó que «no se inundarán los pinares», pese a las advertencias de los detractores del proyecto, «puesto que se establecerán unos niveles piezométricos que marcarán tanto la recarga como la extracción».

Herranz recalcó que «sólo se va a extraer agua cuando se pueda recargar» y que siempre se dejará una cantidad en el acuífero. Con ello también se pretende, con el paso de los años, recuperar los humedales existentes en la zona.

«Es un hecho objetivo que la puesta en marcha de esta iniciativa, en 1998, ha generado numerosos beneficios, que de una manera o de otra han mejorado la vida de nuestros conciudadanos. Y ahora, la culminación del proyecto, con el inicio de las obras de la tercera fase del mismo, permitirá consolidar y mejorar, si cabe, el bienestar social que hemos conseguido en esta comarca durante las dos últimas décadas«, dijo Herranz, quien lanzó un mensaje de tranquilidad a los vecinos de la comarca al asegurar que «el proyecto va a dejar claro que no existe afección ni en el río ni en los pueblos». En este sentido, se mostró convencido de que el estudio de impacto ambiental ofrecerá garantías de ello. «Además de agricultores somos vecinos de los pueblos, y todos queremos que se hable de las bondades de la comarca», indicó.

Los regantes esperan que las alegaciones se puedan resolver en un plazo de unos dos meses, de forma que este verano se conozca si finalmente los estudios son favorables o desfavorables».

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