Pedro Luis Gómez: No hay dos sin tres

El termómetro marcaba 3 grados en el punto de salida de la plaza de los Dolores del Real Sitio de San Ildefonso. De todos modos, la dureza de la prueba ha hecho que los cerca de trescientos participantes hayan entrado en calor rápidamente. El ganador ha invertido menos de 57 minutos en cubrir el recorrido de 16 kilómetros, con constantes subidas y bajadas.

Tras salir de la localidad granjeña han enfilado la senda del río Cambrones, bordeando el embalse del Pontón Alto hasta llegar a la Vía Verde del río Eresma. Los atletas han dejado atrás las destilerías de DYC y han entrado en el término municipal de Segovia por las piscinas de La Albuera.

Los repechos en el tramo final, que ha discurrido por el barrio de San Lorenzo y por la cuesta de Santo Domingo para alcanzar el Azoguejo y ya la avenida del Acueducto, donde estaba situada la meta, han sido quizás los momentos más duros por el cansancio que ya hacía mella en los corredores.

Después de Pedro Luis Gómez ha cruzado la meta el triatleta de La Granja, Abraham Tapias. El podio lo ha completado Miguel Ángel Martín Granados, de Los Galgos Segovianos. Los tres han sido los únicos corredores que han bajado de la hora en este exigente recorrido que ha atraído a participantes de diversos puntos de la provincia (Fuentemilanos, Torrecaballeros, Navalmanzano, Carbonero el Mayor, Hontoria, Palazuelos de Eresma, La Lastrilla, Fuentepelayo, San Cristóbal de Segovia, Bernuy de Porreros, El Espinar, Trescasas, Madrona, Real Sitio de San Ildefonso, etcétera), así como de Madrid, San Lorenzo del Escorial, Collado Villalba, Salamanca y hasta de Cartagena.

En la categoría femenina, la victoria ha sido para Eleanor Sigdwick, que toma el relevo en el palmarés de la segoviana Helena Herrero. La segunda mujer en cruzar la línea de meta situada a la altura de la iglesia de San Millán ha sido Sylwia Posluzna. Y el tercer escalón del podio ha sido para Patricia Serrano.

El goteo de atletas en la meta ha sido continuo durante cerca de cincuenta minutos, lo que da una idea de la dureza de la prueba, que ya es un clásico en el calendario deportivo que, además, conjuga la solidaridad a favor el Banco de Alimentos.