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César Blanco Elipe
Miércoles, 22 de febrero 2017, 14:35
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Unión General de Trabajadores (UGT) y Comisiones Obreras (CC OO) han regresado a la calle para dar un toque de atención a la patronal y al Gobierno de la nación. La movilización ha tenido lugar este miércoles ante la sede de la Federación Empresarial Segoviana. Entre las reivindicaciones que más han resonado durante la concentración sindical está la defensa de la negociación colectiva para salir de la asfixia. Así lo ha manifestado el representante de UGT, Manuel Sanz, quien hace una llamamiento por alcanzar «un acuerdo a favor de subir los salarios para que sean dignos y en concordancia con el crecimiento económico».
En este sentido, la patronal parte de que no puede ir más allá de un incremento del 1,5%; sin embargo, en opinión de las organizaciones sindicales, esa subida se queda corta en comparación con sus pretensiones y «redundaría en la precariedad». Y es que los trabajadores «siguen perdiendo poder adquisitivo». La demanda de los sindicatos es que el aumento salarial se sitúe en torno al 1,8% y el 3%. Además, reclaman que se añada la cláusula de revisión salarial en función de la subida del IPC (Índice de Precios al Consumo), que en los últimos meses ha dibujado una curva ascendente movida fundamentalmente por el encarecimiento del petróleo y de las hortalizas.
Los sindicatos subrayan que «la reducción del desempleo es demasiado lenta», como se queja Sanz. Advierten de que el 56% de las personas sin trabajo son parados de larga duración. De ahí que rechacen las medidas impulsadas por el Gobierno de España, su reforma laboral y aboguen por «la necesidad de un nuevo plan de choque».
La precariedad preside la actual contratación, reprueban las centrales sindicales. De hecho, solo nueve de cada cien contratos que se firman son indefinidos. Y de éstos, la mitad aproximadamente son a tiempo completo. «La situación es insostenible», alertan los portavoces de las dos centrales sindicales que han salido a la calle, sobre todo viendo que el 45% de los ciudadanos apuntados en las oficinas de empleo «no tienen derecho a ninguna prestación», lamenta el representante de UGT.
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