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La alcaldesa, Clara Luquero, presenta el presupuesto ante la mirada de los concejales Alfonso Reguera y José Bayón.
El debate de las cuentas del Ayuntamiento confirma la separación entre PSOE e IU

El debate de las cuentas del Ayuntamiento confirma la separación entre PSOE e IU

La abstención del grupo municipal de Ciudadanos facilita que el equipo socialista apruebe el presupuesto de 69,3 millones

Miguel Ángel López

Viernes, 3 de febrero 2017, 20:23

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Ángel Galindo, portavoz de IU en el Ayuntamiento de Segovia, y María José García Orejana, portavoz de Ciudadanos (C's), fueron protagonistas destacados de la sesión de pleno que celebró este viernes el Ayuntamiento de Segovia, la más importante del año porque fue la dedicada a la aprobación del presupuesto anual, que alcanza la cifra de 69,3 millones de eurosun 3,6% más que en 2016. En los debates del pleno, el portavoz de IU confirmó su alejamiento de los socialistas porque, según dijo, «las inversiones están condicionadas por la gestión del equipo de gobierno», que tiene «consecuencias como que los segovianos vamos a perder 10.000 euros al día». Se refería al pago de sentencias judiciales que limita las inversiones reales, reducidas a menos de 4 millones de euros, y también a que la «línea política» de los socialistas está «cada vez más distanciada de la de IU» y «más cerca del PP y de políticas de derechas».

Habló el edil de IU del «acercamiento» de PSOE y PP en la Diputación, y subrayó que su voto «no es un chantaje ni un bloqueo al PSOE, es un voto coherente con nuestras propuestas». Luego, criticó las declaraciones previas a la sesión de la alcaldesa sobre la «responsabilidad» en que incurrirían los grupos que no votasen el presupuesto, destinado en gran parte de las partidas de inversiones a pagar sentencias judiciales. Por eso Galindo expresó su rechazo a la «falta de respeto» que habría manifestado el portavoz del PSOE, Alfonso Reguera, al cuestionar la falta de apoyo de la oposición.

Estos reproches los subrayaron los portavoces de UPyD, Cosme Aranguren, y PP, Raquel Fernández, aunque el primero abundó en sus críticas a la portavoz de Cs, a quien calificó de «veleta» porque «quería ser protagonista y lo ha sido», a pesar de que «ni usted ni la alcaldesa ni viven ni pagan impuestos en la ciudad, si no en La Lastrilla».

De nada le sirvió a García Orejana la intervención en la que recalcó que estos presupuestos no le gustan y, como el miércoles, que explicara los puntos del acuerdo firmado con los socialistas. Contestó a Aranguren que si las propuestas de UPyD no han sido tenido en cuenta es «probablemente porque las de 2016 han sido muy probres», pero después se llevó otro vapuleo, el de Raquel Fernández. La portavoz del PP, después de replicar a García que no ocurriría nada malo si se prorrogara el presupuesto de 2016, le espetó que el punto primero del acuerdo, relativo al CAT, «deja estupefacto» porque supone «una contradicción gravísima de su partido», como la de facilitar con la abstención que se aprueben los presupuestos que incorporan las ordenanzas fiscales que votó en contra.

Alusiones y enmiendas

El debate propició alusiones cruzadas entre Reguera, Aranguren, Fernández y Galindo sobre las opciones de pacto previas al pleno el portavoz del PSOE dijo que «no se ha pactado con UPyD porque Aranguren me ofreció el voto positivo de IU», con peticiones de que se retirase una u otra declaración y con réplicas como la del portavoz de UPyD «el señor Reguera se ha puesto el traje de Arahuetes para repartir estopa» o la de la popular, que increpó al socialista por haberse «llevado al huerto» a García Orejana y motivó una reacción desmesurada en la que se mencionó la igualdad de género, al tomar la segunda acepción del diccionario, y no la primera, la de convencer.

La votación final (doce votos a favor del PSOE, la abstención de las dos ediles de Cs y los once en contra de PP e IU) tuvo otras previas, las de las enmiendas al proyecto de presupuestos de los grupos. Tuvo que aclarar antes el interventor municipal que las enmiendas deben ser concretas, con las cantidades que se detraen de una partida y su destino, además de incluir el presupuesto recalculado para evitar que quede sin cuadrar y con superávit. Por eso las enmiendas del grupo popular, seis en total incluida la de dejar en un euro la partida de 350.000 del CAT quedaron transformadas en una enmienda a la totalidad con la propuesta de devolución del presupuesto y solo tuvo el apoyo de UPyD; la del PSOE y Cs (la que refleja el acuerdo) solo la apoyaron estos grupos, y los demás se abstuvieron, y la de UPyD tuvo en contra los votos de PSOE y Cs y la abstención de IU.

Los demás argumentos reiteraron las declaraciones previas al pleno, incluida la presentación de la alcaldesa de un presupuesto que suma casi 69,4 millones de euros, con un incremento del 3,6%. Clara Luquero insistió en que es obligado destinar al pago de sentencias judiciales casi 8 de los 11 millones previstos para inversiones reales.

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