'Son mis amigos', de Amaral, como inspiración

En el gimnasio del colegio de Santa Eulalia, los niños que estuvieron ayer no fueron a hacer gimnasia. Se celebraba un acto que merecía la pena y los chavales sabían que era un día especial, de esos de los que los profesores les hablarán muchas veces en clase.

Y no era para menos porque el CEIP Santa Eulalia fue distinguido ayer como Centro Embajador en la Promoción y Defensa de los Derechos de la Infancia de la ONG Save the Children. Un reconocimiento concedido por el trabajo y compromiso que tienen con la infancia, algo que llevan demostrando desde nueve años con iniciativas solidarias.

La idea comenzó con la actividad denominada Kilómetros de solidaridad, una carrera que realizan todos los cursos del colegio y que se incluye dentro de la Semana Solidaria, que este año acaba el viernes.

No es la única actividad solidaria que han realizado desde octubre. En el colegio, los niños también han confeccionado marcapáginas solidarias, han hecho manualidades como cadenetas con caras con niños de diferentes nacionalidades, un globo terráqueo, un tapeo solidario y han vendido posavasos y salvamanteles.

Por todo esto, no es de extrañar que la ONG Save the Children haya puesto sus ojos en este centro, que realiza «una labor continuada que implica a toda la comunidad educativa», aseguró ayer la portavoz de Movilización Social de la ONG, Marisol Paniagua. Desde el centro se agradeció ayer este gesto que les ha «sorprendido», según reconoció ayer el jefe de estudios, David Barroso.

Canción

El acto de entrega de la placa conmemorativa comenzó con las palabras del director del colegio que recordó a todos los niños «la importancia de ir aprendiendo el valor que tiene ayudar a los demás», según detalló Miguel García.

Acto seguido, tomaron la palabra Elsa y Diego, de sexto de primaria, que fueron los encargados de enumerar todos los trabajos realizados este año. Ellos dieron paso a la portavoz de Movilización Social de la ONG Save The Children que se encargó de explicar a los niños las dificultades que tienen otros pequeños en el mundo para tener los derechos más básicos, como ir al colegio o recibir asistencia sanitaria. Por eso, Panigua les aseguró que «con lo que hacéis conseguís que otros niños sean más felices» al estar colaborando en la construcción de un mundo mejor ya que «formáis parte de una gran marea solidaria».

El CEIP Santa Eulalia también firmará un decálogo para difundir, defender y promocionar los derechos de la infancia.El acto finalizó con todos los niños en pie cantando la canción que han hecho Cambiando nuestra mirada, una adaptación de la pieza del grupo Amaral Son mis amigos, en la que cuentan la historia de Martina, una niña de nueve años que emigra desde Buenos Aires a Segovia. Un fuerte aplauso y un grito al unísono de Viva Santa Eulalia cerraron este bonito reconocimiento.

• Temas
• Santa Eulalia