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Miembros fundadores de la Red Ambientalista Segoviana. El Norte.
El Espadañal, miembro fundador de la red segoviana ambientalista

El Espadañal, miembro fundador de la red segoviana ambientalista

La unión de colectivos ecologistas nace frente a «unos poderes públicos que no han sido capaces de asegurar la conservación» del entorno

mónica rICO

Lunes, 18 de julio 2016, 15:39

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La Asociación Para la Defensa de la Naturaleza El Espadañal de Cuéllar forma parte de la red ambientalista segoviana, un grupo constituido este mes y formado por distintas agrupaciones de toda la provincia que se acaban de unir para trabajar a favor de la conservación de la naturaleza y la sostenibilidad. Junto al colectivo cuellarano, también forman parte de esta iniciativa la Asociación de Vecinos y Amigos de Ventosilla y Tejadilla, la Asociación Cega, Centaurea, Ecologistas en Acción Segovia, la Plataforma No más mierda, la Red de Semillas de Segovia y Terractua.

La unión se formalizó hace solo unos días, cuando una veintena de personas pertenecientes a las ocho asociaciones activas en el campo de la conservación del medio ambiente en la provincia de Segovia decidieron, en Fuentepelayo, la creación de una plataforma de trabajo estable para apoyar y reforzar las iniciativas que desarrollan los diferentes grupos, promover la información y la sensibilización sobre cuestiones ambientales en la provincia y realizar iniciativas comunes en estos campos.

En el manifiesto fundacional de la red, que lleva por título Unir fuerzas para cuidar el medio ambiente, se argumenta que Segovia posee un patrimonio natural «que, en las últimas décadas, viene sufriendo un intenso de degradación».

La calidad del agua

Entre los signos de ese deterioro, el grupo destaca que «los principales acuíferos de la provincia, que sustentan a buena parte de la agricultura segoviana, se encuentran profundamente deteriorados, contaminados por nitratos y arsénico y esquilmados por unas extracciones de agua abusivas».

Para hacer frente a esta problemática se ha trabajado desde la Asociación El Espadañal, que hace unos meses se sumaba a otras entidades y presentaba alegaciones al proyecto de modificación de aprovechamiento de aguas superficiales solicitado por la Comunidad de Regantes El Carracillo.

La asociación para la defensa de la naturaleza denunciaba posibles daños contra la flora, la fauna y la calidad del agua, además de asegurar que el acuífero y los manantiales de los que se nutre el río Cega en el ámbito geográfico del proyecto se verían también gravemente afectados al reducirse el caudal ecológico del río.

El manifiesto fundacional también expone otros problemas en la provincia, como que los caminos públicos tradicionales «son frecuentemente cerrados y usurpados por propietarios de fincas colindantes»; que los paisajes rurales «sufren un deterioro progresivo provocado por urbanizaciones mal concebidas o mal localizadas, que, en ocasiones, carecen de unos servicios mínimos»; o la proliferación de las extracciones mineras abandonadas «sin haber cumplido las mínimas exigencias previstas por la Ley en materia de restauración».

Contaminaciones

La calidad del aire también es una preocupación para los miembros de la red, que denuncian que muchos pueblos «sufren malos olores que proceden de explotaciones porcinas mal ubicadas y gestionadas; y que el aire que se respira en buena parte de la provincia muestra altas concentraciones de ozono troposférico, un contaminante secundario que afecta gravemente a la salud, muy especialmente a las personas con dolencias respiratorias o cardiacas».

La red también critica que la gestión de los residuos se realiza sin los controles y la supervisión necesarios. «como demuestra el caso de la planta situada en Fuentepelayo»; que «no se aplica el principio de precaución respecto a la contaminación electromagnética y química»; que los espacios protegidos «no cuentan con equipos humanos y recursos materiales suficientes»; o que prosigue «el proceso de despoblación rural, sin que se apliquen políticas efectivas para detenerlo y revertirlo».

Ante esta situación, el manifiesto concluye que «los poderes públicos no han sido capaces, hasta la fecha, de asegurar la conservación del patrimonio natural de la provincia».

En la reunión celebrada en Fuentepelayo se definieron los objetivos de la Red Ambientalista Segoviana (RAS), se identificaron los problemas ambientales considerados más importantes, y se determinaron las fórmulas para asegurar una organización ágil y flexible. Entre las primeras decisiones aprobadas se optó por apoyar a la plataforma No más mierda. También se apoyará la campaña que Ecologistas en Acción de Segovia realizará a lo largo del presente mes para informar y sensibilizar sobre la contaminación por ozono troposférico, un problema que se agrava en los meses de verano.

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