Borrar
Aspecto actual de la casa rectoral aneja al santuario de la Fuencisla.C. Á.
La Junta descarta desmontar el tejado de la casa rectoral y afea al Obispo  «el alarmismo»

La Junta descarta desmontar el tejado de la casa rectoral y afea al Obispo «el alarmismo»

Patrimonio afirma que los técnicos actúan con «celeridad y cautela»

Carlos Álvaro

Viernes, 29 de abril 2016, 06:33

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

«Estamos muy sorprendidos por la reacción del Obispado, porque el problema de la cubierta de la casa rectoral se conoce desde hace meses y para nada debe generar alarma, porque no hay motivos. Del Obispado de Segovia recibimos siempre la máxima colaboración, pero nos sorprende que venga ahora con prisas, cuando han pasado cinco años desde que recibió la obra y todavía no ha dotado de actividad la casa rectoral de la Fuencisla. Fue una obra pagada con dinero público que exigió un esfuerzo económico importante».

Son palabras del director general de Patrimonio de la Junta de Castilla y León, Enrique Saiz, que ayer salió al paso del «alarmismo» a su juicio generado por el vicario general de la diócesis segoviana, Andrés de la Calle, que el día anterior alertó sobre el riesgo de hundimiento de la cubierta de la casa rectoral de la Fuencisla debido a unos «problemas estructurales» detectados cinco años después de la reconstrucción del edificio sobre el que en abril de 2005 cayeron dos mil toneladas de roca caliza.

Según Saiz, los técnicos observaron hace unos meses la aparición de «unos descensos en las vigas de la cubierta», que han requerido de la elaboración de análisis e informes para determinar el alcance y poder actuar cuanto antes. «Estamos a la espera de la decisión final, pero las soluciones que se barajan apuntan a que bastará con acometer un tensionado para reforzar las vigas y evitar daños en la estructura. En ningún caso parece que sea necesario desmontar toda la cubierta, como aseguró el vicario general», aseguró el director de Patrimonio.

Enrique Saiz desveló que, desde que se detectó el problema, no se ha observado que las vigas hayan cedido más de lo que hasta entonces lo habían hecho: «La vigilancia ha sido constante para comprobar si el descenso de las vigas se acentuaba, pero no ha sido así. No se puede hablar, por tanto, de un riesgo de inminente derrumbe. El vicario general sabrá de teología, pero no de arquitectura. Hasta donde yo sé, los informes que tenemos no hablan de tener que desmontar todo el tejado».

El director general de Patrimonio admitió que la empresa que realizó las obras «no está acudiendo a las licitaciones» y fuentes del obispado hablaron de que está en concurso de acreedores: «Desconozco cuál es su situación jurídica, pero, en todo caso, es irrelevante en orden a atajar este problema, porque aquí nadie está eludiendo su responsabilidad, ni la propia empresa. Solo puedo decir que se está trabajando con celeridad y cautela, y que en las próximas semanas se conocerá la solución», manifestó.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios