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Jueves, 29 de enero 2015, 12:28
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El pleno ordinario de mañana del Ayuntamiento desvelará si la avenida Fernández Ladreda cambia ya de nombre o resiste este primer envite. De un lado, el Gobierno municipal e Izquierda Unida (IU), que son favorables a la modificación. Del otro, quienes se postulan como vencedores en la votación: el Partido Popular (PP), que anunció ayer que votará en contra, y el concejal no adscrito Javier Arranz, que también ayer anunció la presentación de una enmienda a la totalidad para que se retire el expediente del pleno, se estudie mejor y se soliciten informes jurídicos e históricos para determinar qué calles, símbolos o monumentos están afectados por la Ley de Memoria Histórica y así completar este expediente.
«Ley de Memoria Histórica sí, Peñalosadas no», apuntó Arranz, que también se mostró partidario de abrir una consulta popular a todas las personas afectadas o interesadas. Las más de doscientas firmas que han recogido los vecinos de Fernández Ladreda en contra del cambio han encendido aún más la polémica, pero al concejal de IU, Luis Peñalosa, no le tiembla el pulso y se mantiene firme en su postura, con la que se daría cumplimiento a uno de los apartados del pacto de gobernabilidad que firmó con Pedro Arahuetes en 2011 para que este fuera alcalde. «No hay duda de que hay que retirar el nombre a Fernández Ladreda porque se levantó contra la República. También habría que quitarle la medalla de oro de la ciudad. Seguramente lo promovamos», señaló ayer.
Peñalosa, que se declaró «relativamente satisfecho con el grado de cumplimiento del pacto de gobernabilidad municipal con el PSOE («Se ha salvado el Paseo del Salón, por ejemplo, y el balance es positivo, pero el cambio de calles se debería haber hecho antes y también se deberían haber dado los pasos necesarios para dejar los garajes y derribar el edificio de la Parra»), defiende que el procedimiento que se ha seguido para cambiar los nombres de plazas y calles vinculados al franquismo «se ha hecho bien». «Para llamar plaza de la Universidad a la plaza Alto de los Leones no creo que haya que recurrir al reglamento de honores y distinciones porque no se trata de una distinción a nadie sino que constata el hecho de que ahí se encuentra la universidad», explicaba.
Cumplir la ley
También sostiene que lo importante es cumplir la Ley de Memoria Histórica. «¿Vamos a preguntar si hay que pagar el IBI o si tiene que volver la pena de muerte?», dijo Peñalosa en referencia a aquéllos que creen que se debería haber consultado a los vecinos sobre la conveniencia del cambio. «Javier Arranz es imprevisible, pero si impera el sentido común, se suprimirá el nombre de Fernández Ladreda como el resto de calles. No pasó nada cuando se cambió la avenida José Antonio por avenida de la Constitución. Esto es un pretexto para atacar a la alcaldesa».
El concejal de IU tampoco se opone a que el debate se amplíe y se discuta, por ejemplo, si hay que retirar la calle que lleva el nombre de su padre, Luis Felipe Peñalosa. «Vinculados al franquismo estamos todos los que vivimos en esa época. Mi padre luchó en el bando nacional, pero era monárquico y antifranquista. Con más razón se la tendrían que quitar al Marqués de Lozoya, pero ya digo que pueden descender al nivel que quieran», argumentó, al mismo tiempo que subrayó que «hay muchísimo de ideología en la oposición a cambiarlo [el nombre a Fernández Ladreda]». «No hay más que ver los personajes que se manifiestan, que están conectados con el nacionalcatolicismo, y todo el mundo sabe quién construyó Fernández Ladreda, Moisés López. Me parece bien que sus descendientes quieran mantener el nombre a la calle, pero de los que están en fosas comunes sin identificar no dicen nada. Los defensores del franquismo me merecen el mismo respeto que los defensores del nazismo».
Rigor y precisión
Mañana se encontrará la oposición en este asunto del PP, de cuyo portavoz municipal, Jesús Postigo, dijo ayer Peñalosa, que «lo mejor sería que se confesara franquista». Un Postigo que ayer se mostró a favor de cumplir la Ley de Memoria Histórica. «Pero con rigor y precisión», subrayó. «Mantenemos nuestra voluntad de cumplir la ley, pero estamos en contra de la interpretación y aplicación que se está haciendo de la misma desde el Ayuntamiento. No entramos en cuestiones ideológicas sino en las formas. No se está aplicando la Ley de Memoria Histórica ni el Reglamento de Honores y Distinciones del Ayuntamiento, que recoge una serie de puntos que no se están cumpliendo. Habría que haber abierto un expediente individual por cada calle en el que se detallaran los requisitos recogidos en la ley y la justificación del cambio, y son cosas que no se han hecho».
El portavoz del PP, que no descarta plantear un recurso ante el Juzgado Contencioso-Administrativo si finalmente se aprueba el cambio considera que «es suficiente para que se reconsidere la decisión el que el 70% de los ciudadanos esté en contra». Y añadió: «Es grave que el Gobierno municipal se esté dejando llevar por propuestas ideológicas de IU. Tuvo desde 2006 hasta 2011 para hacerlo, ya que entonces tenían mayoría absoluta. Están cediendo por una razón partidista y personal y eso dice poco de los que están en el Gobierno municipal».
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