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Los hombres, vistiendo blusón de matanceros, se encargaron del chamuscado y despiece. S. POLO
Respaldo multitudinario a la Fiesta de la Matanza Tradicional

Respaldo multitudinario a la Fiesta de la Matanza Tradicional

LINARES DE RIOFRÍO ·

La asociación de mayores elaboró 800 raciones de patatas meneás con torreznos y chichas para todos los asistentes

M.J. GUTIÉRREZ / WORD

LINARES DE RIOFRÍO

Domingo, 21 de enero 2018, 12:45

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Las buenas temperaturas de la jornada de ayer, a pesar de estar en invierno, hizo que la Plaza Mayor de Linares de Riofrío fuera un hervidero de gente al mediodía, a partir de las dos de la tarde, cuando las mujeres de la asociación de mayores comenzaron a repartir entre las personas que hacían una larga fila las 800 raciones de patatas meneás con torreznos elaboradas, que acompañaron de otras tantas de chichas y un buen vaso de vino.

Éste era el colofón perfecto a una mañana llena de actividad en Linares de Riofrío, ya que el municipio celebraba ayer su fiesta de la matanza tradicional, al amparo de la Diputación de Salamanca, por lo que contó con un maestro de ceremonias que fue explicando todo el proceso de la matanza, desde el chamuscado del cerdo con el que se inicia este acto hasta su despiece. Unas labores que corrieron a cargo de los hombres, vestidos todos con blusón de matanceros, mientras que las mujeres se encargaban de elaborar la comida que darían más tarde y que tanto éxito tuvo.

No faltó durante la mañana la demostración de cómo se elaboraban antiguamente y de forma totalmente artesanal los chorizos, las morcillas y los farinatos, que muchos siguieron con gran atención y otros no dudaron en grabar o fotografiar con sus cámaras o teléfonos móviles.

Tampoco faltó la buena música y los bailes del público asistente, en esta ocasión, gracias a uno de los tamborileros asiduos a todas las fiestas de Linares de Riofrío, como es Vicente Pérez Oliva, que amenizó el ambiente durante toda la mañana y también durante el tiempo que la gente guardó cola para recoger su plato de comida, que degustaron repartidos por la Plaza Mayor, unos sentados en el medio en torno a una buena mesa, otros en los bordillos de la acera o bien en las escaleras de los establecimientos que hay en el lugar. Cualquier sitio era bueno para disfrutar de una buena comida en compañía de vecinos y amigos.

Entre los asistentes, muchos forasteros que no quisieron perderse una nueva edición de la fiesta de la matanza de Linares.

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