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Los hermanos Recio y José Adrián Cornejo, junto a las autoridades.

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Los hermanos Recio y José Adrián Cornejo, junto a las autoridades. MANUEL LAYA

Medallas de Oro de la Ciudad para los valores del deporte y la tradición cofrade

Salamanca reconoce el movimiento social de Perfumerías Avenida y la Junta de Semana Santa

EVA CAÑAS / WORD

SALAMANCA

Martes, 17 de octubre 2017, 10:27

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El escenario del teatro Liceo se vistió ayer de gala para albergar la entrega de las Medallas de Oro de la Ciudad, en esta ocasión, otorgadas al equipo de baloncesto femenino Perfumerías Avenida y a la Junta de Semana Santa, que suman 25 y 75 años respectivamente de historia viva en la capital.

Un Liceo que se tiñó de forma simbólica de ‘azul’ y ‘morado nazareno’. Los primeros, la ‘marea’ que arropa al equipo de baloncesto desde sus orígenes, y los segundos, los de cofrades que hacen posible la semana de Pasión cada año. El primero en intervenir en el acto fue el juez instructor del expediente de concesión, el concejal de Cultura, Julio López Revuelta, quien recordó que estos dos reconocimientos han sido ganados «en las canchas de baloncesto de toda Europa y en las calles de Salamanca convertidas en la Vía Dolorosa una vez al año».

Y al igual que estas dos instituciones del deporte y de la religiosidad popular reciben una Medalla de Oro, tanto jugadoras como cofrades, puntualizaba el concejal, «se han alzado con el metal dorado defendiendo sus colores o con las medallas que les vinculan a una cofradía, que conocen bien el valor de las mismas más allá de la aleación del metal con el que han sido forjadas».

En ambos casos repasó su trayectoria, de 25 años, 33 títulos y una decena de galardones y reconocimientos del Club de Baloncesto Perfumerías Avenida, y de 75 años velando «por la preservación de esta muestra religiosidad popular, que es, además, una realidad cultural y social».

El primero en recibir la Medalla de Oro y el diploma fue el presidente del equipo de baloncesto, Jorge Recio, que lo hizo acompañado de sus hermanos Juan Alberto, Javier y Miguel Ángel. Visiblemente emocionado en diversos momentos de su discurso, Jorge Recio recordó que junto a su familia, «siempre hemos creído que no hay mejor vínculo que el deporte, para devolverle a Salamanca parte del cariño y del apoyo que siempre nos ha concedido».

Asimismo, reconoció que el camino en el mundo del deporte «nunca es fácil», aunque realmente lo complicado había sido «mantenerse, consolidar un proyecto, y sobre todo, universalizarlo». Recio también agradeció a aquellos que entendieron que el proyecto de Perfumerías Avenida era algo que llegaba «para quedarse, para dignificar nuestra tierra», y para el presidente del club, la elite ha sido una excusa que les ha permitido alzar títulos y alcanzar récords, «pero todo esto no deja de ser el tejado de un edificio que tiene sus cimientos robustos y profundamente hundidos en esta Salamanca docta, histórica y castellana». Y Recio se refería a los cimientos formados por miles de niñas que han pasado por su cantera, a la que califica «nuestra joya». Tampoco quiso dejar fuera a la afición, «otro pilar indispensable, nuestra tercera catedral», a la que añadió una serie de adjetivos:«Fiel, ejemplar, única y admirable», a la que se conoce como marea azul.

El teatro Liceo se vistió de gala para entregar la distinción a estas dos entidades

Finalmente, agradeció a la ciudad que les acoge,«que nos sustenta y con la que formamos una comunión perfecta». Jorge Recio lanzó un mensaje sobre los valores del deporte:«Honrar en la derrota y ser modesto en la victoria».

El actual presidente de la Junta de Semana Santa de Salamanca, José Adrián Cornejo, fue el encargado de recoger la Medalla de Oro de la Ciudad otorgada a la institución, quien quiso compartir con todas las cofradías, hermandades y congregaciones, «que han formado o forman parte de la Junta de Semana Santa y con todos los que desempeñan cargos de responsabilidad en sus juntas de gobierno».

En su intervención repasó momentos clave en la historia de lo que primero se denominó Junta Permanente, de sus anteriores presidentes o de sus impulsores. Para Cornejo, la distinción que han recibido «debe suponer una motivación más para acrecentar nuestro compromiso con esta antiquísima tradición y para afianzar el compromiso de seguir manteniendo nuestra condición de cristianos y nuestra fe, pilar fundamental de las cofradías».

Por último, quiso dejar constancia que bajo su punto de vista, «Salamanca y la Semana Santa no son dos conceptos distintos u opuestos, sino que son una sola cosa, llamada Salamanca y su Semana Santa», culminó.

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