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El estanque de La Alamedilla, con el agua verde y cubierta de una película blanca. MANUEL LAYA
El estado del estanque de La Alamedilla desata una oleada de críticas

El estado del estanque de La Alamedilla desata una oleada de críticas

Las quejas de los vecinos y la insistencia del PSOE obligan al Consistorio a intervenir para implantar un sistema que evite el color verdoso del agua

Ricardo Rábade

SALAMANCA

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Sábado, 14 de octubre 2017, 11:26

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Un bajo nivel del PH es la causa del color verde y el velo blanquecino que cubre el estanque de La Alamedilla. Ésta es la versión oficial que ha dado el Ayuntamiento, concretamente el grupo municipal de gobierno del Partido Popular, respondiendo así a los constantes requerimientos de información del PSOE. El concejal socialista Arturo Santos preguntó semanas atrás por este asunto en dos ocasiones en la Comisión de Medio Ambiente del Consistorio. Ante la falta de respuesta, lo volvió a hacer en el último pleno municipal con la presentación de otra pregunta, en este caso por escrito, lo que se tradujo en una contestación oficial por parte del grupo municipal de gobierno, concretamente de su concejal Javier García Rubio.

Arturo Santos explicó ayer que numerosos vecinos de la zona se han quedado del estado que presenta el estanque, tomando incluso fotografías del aspecto verdoso del agua. El estanque también fue objeto de mejoras durante la remodelación integral que se ejecutó en el parque de La Alamedilla hace dos años. La actuación consistió entones en la mejora de la estructura del mismo, con un tratamiento más idóneo del agua. Sin embargo, dos años después la suciedad ha reaparecido, desatando el enfado vecinal y las críticas políticas.

Según las explicaciones que facilitó en el último pleno municipal Javier García Rubio, la causa de esta suciedad y el color verdoso obedecen a la presencia de un nivel de PH muy bajo, probablemente debido a reacciones químico-biológicas donde juega un papel muy importante la materia orgánica en el agua. El actual sistema de tratamiento se hace con un sistema de cloración salina y recirculación del agua por un equipo de electrolisis. Sin embargo, los resultados obtenidos no han sido los esperados.

Arturo Santos recalcó que aunque el grupo de gobierno del PP «decía al principio que no pasaba nada, al final se ha comprobado que estaba fallando el sistema y si no insistimos y no llevamos al pleno municipal una pregunta por escrito para que nos contestaran, no habrían hecho nada». Eso sí, el edil socialista puntualizó que, pese el sospechoso color verde del agua, «los patos y los cisnes no corren ningún peligro», dado que están siendo alimentados de forma correcta por los voluntarios de la Sociedad Española de Ornitología (SEO), presentado actualmente un buen estado de salud. Además, está terminantemente prohibido, como sucedía hace años, que los vecinos den comida a estos animales.

La solución final por la que se ha decantado el Ayuntamiento consiste, según el informe que remitió Javier García Rubio a la oposición socialista, en la implantación de un sistema automático para analizar de forma continua los niveles de PH en el agua, que permitirá evitar que se acumulen las algas y su color verdoso.

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