Corchado y Rivero pisan el acelerador para disputarse los 2.265 votantes de Serrano

En ambos casos, la estrategia pone un énfasis especial en captar posibles votantes entre los 2.265 universitarios que el pasado 20 de noviembre depositaron en las urnas la papeleta de la catedrática de Bioquímica y Biología Molecular, María Ángeles Serrano, quien finalmente no podrá concurrir a la segunda vuelta, al igual que le sucedió al catedrático de Antropología Social, Francisco Giner Abati. Serrano aglutinó en la primera vuelta el 27% del voto ponderado, mientras que Giner Abati se tuvo que conformar con un minúsculo porcentaje del 3%.

Ricardo Rivero, que fue el candidato vencedor en los comicios del pasado lunes al acaparar el 37% de apoyos del voto ponderado, explicó ayer que prosigue con su campaña electoral, que incluye desde actos públicos y encuentros sectoriales con los estamentos académicos en los diferentes centros. Se mostró «optimista» e «ilusionado» con la decisión que adoptarán los universitarios el día 30 y recalcó que está «trabajando»intensamente estos días para movilizar a la comunidad universitaria en torno a su proyecto académico. También reconoció que está intentando captar adhesiones entre los votantes de María Ángeles Serrano,«pero no solo entre ellos» , y confirmó que está recibiendo mensajes de apoyo y de compromiso, garantizándole sus votos, desde las filas de esa corriente académica.

En los círculos de la candidatura que abandera Juan Manuel Corchado también se respiran y vislumbran buenas sensaciones con vistas a la trascendental cita del día 30, especialmente por el hecho de que sectores del profesorado y de los estudiantes que se decantaron en la primera vuelta por el mensaje académico que auspiciaba la exvicerrectora de Internacionalización han manifestado públicamente en estos últimos días su plena disposición a votar a Corchado el día 30, según los datos recopilados por este diario.

El peso electoral de María Ángeles Serrano se perfila, por irónico que resulte al haber quedado excluida de la carrera electoral por elRectorado, como especialmente determinante en estos comicios, sin olvidar tampoco la capacidad de movilización que tengan finalmente los estudiantes de grado, que aglutinan porcentualmente el 21% del sufragio ponderado.Todo apunta, sin embargo, a que resultará muy difícil de superar la participación récord que protagonizaron los alumnos en los comicios del pasado día 20, cuando ejerció su derecho al voto el 25% del censo electoral, un promedio inédito hasta ahora en la historia de laUniversidad a lo largo de las últimas cuatro décadas.

Si se repiten las tendencias que marcaron la primera vuelta electoral, Ricardo Rivero volvería a ganar entre el sector del personal de administración y servicios y entre los estudiantes. No en vano, el exdecano de laFacultad de Derecho fue apoyado por el 44%de los estudiantes de grado, duplicando con creces el 21% que simbolizó el respaldo del alumnado a las ideas académicas que profesa JuanManuelCorchado. Un panorama muy similar quedó visible entre el personal de administración y servicios, ya que Rivero fue avalado por el 48% de la plantilla de trabajadores del área no docente que votó, doblando también los respaldos que sembró Corchado en este sector, que se redujeron al 24%.

Rivero también ganó en otros dos ámbitos más, como fueron los estudiantes de máster y doctorado, con un 40% frente al 27%de Corchado, así como el colectivo de los profesores asociados, que arrojó un 47% para Rivero frente al 28% de Corchado.

Por su parte, el catedrático de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial quiere incrementar su techo electoral entre el profesorado, donde venció en tres sectores, al margen del caso específico de los asociados, especialmente para contrarrestar y hacer frente al previsible nuevo triunfo de su contrincante en el sector estudiantil y entre el personal de administración y servicios.Por ello, muchos de los profesores que votaron a Serrano se convierten en un nicho electoral especialmente determinante para las opciones de Corchado.

En los comicios del lunes, el vicerrector de Investigación yTransferencia se impuso entre el colectivo de los profesores doctores con vinculación permanente, donde se encuadran los catedráticos y los profesores titulares, puesto que venció con el 34% del voto ponderado, aunque solo un punto por encima de Rivero. El catedrático de Ciencias de la Computación también saboreó las mieles del triunfo en el apartado correspondiente al resto de categorías del profesorado, con un 38% frente al 37% que asignaron las urnas al exdecano de Derecho. Ademas, Corchado ganó entre los profesores ayudantes y el personal investigador, con un 53% frente al 19% de su contrincante.

En las votaciones de este pasado lunes ejercieron su derecho al sufragio 8.597 universitarios, todos ellos pertenecientes a un censo electoral que estaba formado por 28.533 personas.