Reclaman que el Plan de Gestión amplíe la protección más allá de la Ciudad Vieja

La asociación Ciudadanos por la Defensa del Patrimonio ha instado al alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, a «reconducir» el Plan de Gestión Integral de la Ciudad Vieja antes de su aprobación inicial en el pleno del Ayuntamiento, de forma que se recojan todas las recomendaciones que la misión de expertos del Comité de Patrimonio Mundial que visitó Salamanca en febrero de 2009. Se trata de una serie de puntualizaciones que los patrimonialistas consideran esenciales y de gran importancia «para preservar la integridad y autenticidad» del bien inscrito en la lista de Patrimonio Mundial.

Como se recordará, precisamente durante las celebraciones por el 25º aniversario de la declaración de Salamanca como Patrimonio Mundial, en diciembre de 2013, el alcalde presentó este Plan de Gestión Integral y anunció que se sometería a un periodo de alegacione antes de su aprobación en el pleno. No obstante, el tiempo pasó y hasta después de las elecciones de 2015 no se retomó este proyecto, exigido por la Unesco y por la propia normativa municipal, ya que así se recoge en el Plan General de Ordenación Urbana, aprobado en 2007.

Ciudadanos por la Defensa del Patrimonio recordó, en este sentido, que una de las primeras recomendaciones de la Unesco solicitaba ampliar la tradicional área inscrita en la lista de Patrimonio Municipal «para incluir los lugares que presentan un interesante patrimonio, urbano o histórico» hacia el oeste y el norte de la Ciudad Vieja, así como «la modificación del perímetro de la zona hasta incluir todo el entramado de la ciudad antigua, dentro de sus murallas medievales, y la zona de ribera opuesta al río Tormes, con sus importantes vistas sobre el Bien Patrimonio Mundial, para incrementar su protección».

En cuanto a la conservación del patrimonio edificado los expertos ya mostraron su preocupación, señalan desde la organización, porque «las fachadas ocultan la destrucción de las estructuras internas de los edificios adaptándolos a nuevos usos». Una práctica que se denomina desde esas esferas como «fachadismo» y que, recalcan los expertos, al final es susceptible de «afectad a la esencia misma del bien por la pérdida de integridad del patrimonio». De ahí que la asociación reclame que el Plan de Gestión Integral recoja también medidas relativas a la conservación de la «volumetría de las construcciones existentes».

Otra cuestión que Ciudadanos por la Defensa del Patrimonio ha recordado al alcalde es la necesidad de frenar las modificaciones puntuales «a conveniencia» del planeamiento urbanístico de la ciudad, ya que los expertos de la Unesco consideraron en su informe que tales actuaciones «deben estar prohibidas o ser administradas de forma restrictiva a través de un Plan Especial de Protección con el fin de evitar abusos perjudiciales para el patrimoniode la ciudad y su integridad». Y por ello solicitaron «el desarrollo de un Plan de Gestión más específico y más restrictivo a las modificaciones en los edificios y la protección de los espacios libres».

Otras recomendaciones de la misión de expertos, que sí son citadas en el Plan de Gestión Integral, serían «limitar del estacionamiento en la zona intramuros de la ciudad» o «ampliar la comunicación con las asociaciones locales», si bien la promoción de la actividad artesanal (concretamente el tallado de la piedra) carece de desarrollo alguno en el documento municipal, subrayan desde la asociación patrimonialista.

En la actualidad el Plan de Gestión de la Ciudad Vieja está siendo estudiado en sesiones extraordinarias de la Comisión municipal de Fomento y Patrimonio. Hoy, precisamente, tendrá lugar uno de eso encuentros, en los que se repasará parte del tomo primero del plan, que narra la historia y formación de la ciudad, y se comenzará el tomo segundo, que ya trata sobre las actuaciones y contenidos.

Con anterioridad, el plan fue revisado por los expertos de la comisión técnico-artística que cada 15 se reúne en el Consistorio, que incluyeron varias aportaciones al documento. Los pasos siguientes serán la organización de una jornada divulgativa para que la sociedad civil pueda conocer la extensión y alcalde de este plan de Gestión de la Ciudad Vieja y su estudio en el Consejo Sectorial de Urbanismo, antes de ser sometido a aprobación en la Comisión de Fomento y en el pleno municipal.

La asociación Ciudadanos por la Defensa del Patrimonio ha sido crítica con el plan desde su primera presentación, en aquel diciembre de 2013, y también en esta nueva etapa. Los patrimonialistas salmantinos remarcaron, tras la nueva puesta de largo del documento realizada por el alcalde el mes pasado, que el plan «no aporta una visión integral y global que permita diseñar una estrategia de intervención mediante herramientas y planteamientos contemporáneos».

Asimismo, preguntaron dónde están las «prioridades en la intervención», ya que no se establece una escala de importancia de los intereses. En general, para la asociación el plan sigue siendo un documento «suficientemente ambiguo» para que «nada cambie». «No se pueden identificar sus propuestas, carece de concreción, de pautas, de medidas, de plazos, no profundiza, ni teoriza ni intenta transmitir conocimientos o explicaciones», señalaron, marcando la sospecha de que el plan no va a suponer ningún cambio en la política urbanística que sobre el patrimonio se realiza en la ciudad.

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