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Ignacio Aguaded, catedrático de Educación en la Universidad de Huelva y editor de ‘Comunicar’.
«Frente a la tecnofobia y la tecnofilia, me quedaría con la tecnocrítica»

«Frente a la tecnofobia y la tecnofilia, me quedaría con la tecnocrítica»

Frente al amor o al miedo a las nuevas tecnologías, defiende el conocimiento de las mismas para poder dominarlas y gracias a ellas transformar el universo positivamente

Jorge Holguera Illera

Viernes, 2 de diciembre 2016, 19:01

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El profesor Ignacio Aguaded, editor de la revista científica iberoamericana Comunicar, que es de las más reconocidas publicaciones científicas de educación y comunicación en español, estuvo recientemente en la Universidad de Salamanca. Aguaded es catedrático de Educación en la Universidad de Huelva, a su vez director del Grupo de Investigación Ágora, y presidente del Grupo Comunicar. Su presencia en la ciudad del saber se debió a la impartición de un taller sobre Escritura en revistas científicas, dirigido a los doctorandos del programa de Formación en la Sociedad del Conocimiento.

¿Suele venir mucho a las universidades salmantinas?

Tengo magníficas relaciones con ambas universidades. La universidad salmantina va a cumplir 800 años, el peso de la historia es fuerte, pero es necesario enfocarse al futuro. El pasado es un gran crédito pero hay que construir futuro, que es ya presente porque nos exige profundos cambios en la forma de enseñar, aprender e investigar.

Háblenos un poco de su revista.

Comunicar surge en los 90, cuando intuimos que Internet va a suponer una transformación radical de la realidad. A mediados de los 90 utilizábamos internet un 1% de la población, al principio del siglo un 10%, ahora estamos en un 60-70%. Las estadísticas prevén que la gran revolución va a llegar cuando el 100% tenga accesibilidad completa. Entonces hablaremos de la web semántica, de Internet de las cosas como algo real. Es necesaria una reflexión, y eso en la universidad se llama investigación. La universidad tiene que ofrecer la capacidad de dar respuestas creativas en positivo.

¿Se enseña igual?

La estrategia educativa sigue permaneciendo intacta. Tenemos que enseñar a las personas a consumir los medios de forma inteligente porque los medios de por sí no garantizan su consumo racional. Por eso Comunicar surge para congregar a investigadores de todo el mundo, preocupados de cómo hacer que las tecnologías sean instrumentos de transformación positivos.

¿Hacia llevan las redes sociales?

Las redes sociales están transformando también nuestras relaciones de carácter personal. Hoy las relaciones sociales son omnipresentes, están en todos los sitios y ámbitos. De alguna forma los seres humanos tienen que controlar sus relaciones, y no las redes sociales controlarlos a ellos. Las redes sociales comunes y profesionales permiten a los investigadores conocer la realidad de la investigación incluso antes de que se publique. Permiten la interacción de investigadores de cualquier parte del mundo rompiendo la frontera del espacio y tiempo.

¿Hacia dónde vamos?

Los cambios son tan drásticos que no somos capaces de percibirlos. Sí hay unas tendencias que ayudan a prever. Nuestros hábitos de vida van a ser semejantes pero la irrupción de las tecnologías va a ser mucho más fuerte, por eso desde el mundo educativo defendemos la importancia de la formación en esas tecnologías como una estrategia para que el ser humano siga siendo el que controle su universo, sus tiempos de consumos, y la influencia que tienen en nuestra vida ordinaria, en nuestras relaciones personales. Creo que las tecnologías pueden ser una herramienta útil. Ahora bien, entre la tecnofilia (amor apasionado por las tecnologías) y la tecnofobia (miedo al papel que estas puedan adquirir en nuestras vidas), yo me quedaría con una posición intermedia, la tecnocrítica (que considera que estas tecnologías van a transformar nuestro universo si somos capaces de dominarlas, de conocerlas, de apropiarnos de ellas).

¿Tiene algún proyecto en pie?

Estamos con un proyecto coordinado con el Ministerio I+D: Competencias mediáticas de la ciudadanía en medios digitales emergentes (Smartphone y Tablet): Prácticas innovadoras y estrategias educomunicativas en contextos múltiples. Trabajamos en red, somos cooperativos. Pretendemos demostrar cómo los Smartphone están transformando nuestra vida y cómo tenemos que formar a la ciudadanía para que haga un consumo inteligente de los Smartphone, Tablet, iPad y videojuegos. Somos un grupo de 60 investigadores, de 13 países y de 20 universidades españolas. Queremos demostrar la importancia de la práctica de la cooperación, de las redes a través de los recursos tecnológicos para que esa investigación sea más potente. Estudiar cómo se hace el consumo en los Smartphone y ver cómo eso está influenciando en nuestra vida, nuestra forma de ser y de comportarnos, nuestra forma de trabajar y de convivir.

¿Qué ventajas tiene cooperar?

Cooperación es la herramienta fundamental para tener éxito en el mundo de la investigación. De hecho nuestra revista, Comunicar, es una revista muy cooperativa, que colabora con revista de todo el mundo. Yo creo que la cooperación frente a la competencia, es la estrategia fundamental para que los pueblos puedan desarrollarse. Las actitudes endogámicas o narcisistas, como hemos podido ver en las campañas estadounidenses, por mucho que triunfen en unas elecciones presidenciales, están condenadas al fracaso, como en cualquier ámbito de nuestra vida.

Su revista es un buen mirador para detectar las debilidades y fortalezas de España.

Efectivamente, Comunicar es una revista internacional, con presencia de 40 países, con consejos editoriales en China, Reino Unido, Estados unidos y por supuesto en toda América latina. Tiene vocación internacional y la ejerce tanto en sus lectores, como en sus publicaciones, en sus autores y en todo el proyecto global. Se publica en español, en inglés, chino y portugués. En España, la investigación está cambiando mucho al igual que la sociedad. Hay investigadores a los que les cuesta adaptarse a esta auténtica revolución en la forma de acceder a la información, de procesarla y de transmitirla. Hace falta mucha información. Soy ante todo educador y creo que hay un déficit muy importante en las tecnologías emergentes que hoy son las que dominan el mundo. Un gran investigador que no publique en los entornos emergentes verá como su visibilidad cae en picado.

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