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ELENA GÓMEZ / WORD
Lunes, 27 de junio 2016, 12:50
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La localidad de Monterrubio de la Sierra despidió ayer sus fiestas patronales en honor a San Juan Bautista y lo hizo de la mejor manera posible: con la celebración de su habitual paellada popular en la que se prepararon 400 raciones de comida.
Después de instalar las mesas debajo de los toldos instalados durante la jornada anterior en las pistas deportivas de la localidad, los vecinos fueron uniéndose a la cola para recibir su copioso plato de paella, acompañado por un trozo de pan y jarras de sangría, que ayudaron a refrescar las gargantas de los presentes en una jornada marcada por el buen tiempo y el calor que, los toldos, ayudaban a combatir.
Así, familias enteras, amigos e hijos del pueblo se reunieron alrededor de la mesa para compartir la comida de confraternidad y poner el punto y final a estas fiestas, que también marcan el principio del verano, en el que el municipio se llena de gente.
Entre los comensales se encontraba también el diputado socialista de zona y alcalde del cercano municipio de Morille, Manuel Ambrosio Sánchez, que quiso acompañar a los vecinos en este día tan especial para todos ellos y que compartió mesa con el alcalde de Monterrubio de la Sierra, Agustín Sánchez.
Tras la comida, que tuvo como postre un helado, los vecinos de Monterrubio de la Sierra pudieron disfrutar de una sesión de baile con música cantada en directo que puso el broche de oro a la celebración de estas fiestas patronales que han animado durante tres días la actividad en este municipio salmantino.
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