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Venancio Blanco, junto al director del museo y responsables del convento.
El ‘Carmus’ luce ya la nueva escultura de Santa Teresa de Venancio Blanco

El ‘Carmus’ luce ya la nueva escultura de Santa Teresa de Venancio Blanco

El arista salmantino ha cedido al Museo Carmelitano de Alba de Tormes una figura de bronce que, en conjunto, alcanza los 2,23 metros de altura

redacción / word

Viernes, 22 de abril 2016, 13:03

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Alba de Tormes y su Museo Carmelitano cuentan desde ayer con un nuevo atractivo cultural de primer orden. Se trata de Santa Teresa: Es tiempo de caminar, que el escultor de Matilla de los Caños, pero con proyección internacional Venancio Blanco ha realizado expresamente para su emplazamiento en el Carmus y ha donado al mismo.

El padre Miguel Márquez Calle, Superior Provincial de los Carmelitas Descalzos de la Provincia Ibérica, fue el encargo de bendecir la nueva figura de bronce, que ya luce en el museo y que quedará expuesta en la terraza del museo que se abre hacia la cabecera de la basílica teresiana, llamada desde hoy La terraza de Venancio Blanco.

La fundición de la figura se llevó a cabo se hizo en el taller Fademesa de Arganda del Rey y ha sido financiada por la empresa Artisplendore. La escultura tiene 1,53 metros de alto y está sobre una peana de 70 centímetros de alta, siendo la altura total de 2,23 metros.

José Luis Gutiérrez, director de Carmus, en nombre de las Carmelitas de Alba pidió hace algún tiempo a Venancio Blanco permiso para copiar alguna de sus imágenes para el museo. Sin embargo, el escultor salmantino se ofreció inmediatamente realizar una nueva imagen para donar al museo.

La escultura refleja una santa en actitud de marcha tras una cruz que guía su mirada y sus pasos Santa Teresa: Es Tiempo de Caminar recordando las palabras de Teresa al ver que la llevan el Santísimo. También recuerda la imagen otras palabras suyas: «Juntos andemos, Señor. Por donde vayas tengo que ir, por donde pases tengo que pasar». (C 21,6).

Carmus abrió sus puertas el 28 de marzo de 2012 y en junio de 2014 se abrieron las nuevas salas del Museo. Con ellas se acerca la vida y el mensaje de Santa Teresa a través de más de 840 obras procedentes del convento y donadas por particulares desde el siglo XVII para rendir culto a la Santa. Entre las obras destacan dos piezas del siglo XXI, la Ascensión de Santa Teresa de Miguel Ángel Espí y la nueva Santa Teresa de Venancio Blanco.

Según el director, José Luis Gutiérrez, se trata de un museo «consolidado dentro de las peregrinaciones religiosas con un profundo contenido espiritual». Recientemente el museo ha incluido la doble lectura artística y espiritual en el recorrido por la exposición, con información artística y textos teresianos.

Carmus es un museo vivo que ha incorporado obras desde al siglo XVI al siglo XXI. En primer lugar la pintura al óleo sobre tabla Ascensión de Santa Teresa (2013) de Miguel Ángel Espí que ocupa el ático del retablo del sepulcro primitivo en el templo y cuyo boceto está en el Museo y ahora la estatua de Venancio Blanco. Ambas obras han sido donadas por sus autores al Museo Carmelitano.

El Museo Carmelitano de Alba de Tormes tiene cuatro zonas. La sala de santa Teresa. La iglesia que ofrece sus retablos y sepulcros. Los camarines, sepulcro y reliquias, y salas de pintura sobre cobre. Y, finalmente, el edificio nuevo con 7 salas, recepción, audiovisuales, almacenes y talleres.

Santa Teresa siempre ha estado muy presente en la obra de Venancio Blanco. Además de los muchos bocetos, versiones y apuntes a lápiz, cinco imágenes de Santa Teresa obra del escultor de Matilla de los Caños se exponen en espacios públicos: la gran estatua que junto a las tapias del convento de Alba y la basílica teresiana, desde 1977 da la bienvenida a la Villa ducal, y tres más en el Museo de Escultura Religiosa Venancio Blanco de la Fundación Mapfre, además de la nueva obra estrenada ayer.

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