Satisfacción general entre los pasajeros y los directivos de Renfe por el nuevo tren

El Alvia 04899 pasará a la pequeña historia de Salamanca como el primer tren de altas prestaciones que llegó a la ciudad. Ayer se inauguró la nueva ruta Salamanca-Madrid de alta velocidad, tan deseada como necesaria para la provincia.

El convoy partió de Salamanca a las 06:50 horas, llegó a Chamartín hora y media más tarde, aguardó su salida hacia nuestra capital y a las 08:55 enfiló la ruta a través de Segovia y Medina. Llegó a Salamanca a las 10:24 horas, siete minutos antes de lo previsto y una hora más rápido que el tren de media distancia que conecta Salamanca con Madrid a través de Ávila.

La opinión de los pasajeros era unánime. Alabaron la brevedad del viaje, destacaron que esta línea permite ganar tiempo y aseguraron que es «mucho mejor» que la del convoy de media distancia. También hubo quien recordó el retraso secular de Salamanca en materia de comunicaciones afirmando que «ya era hora» de que las altas prestaciones llegasen a la provincia.

Logros y dudas

El primer enlace rápido transportó a unos 50 pasajeros, aunque el tren tiene capacidad para 282 personas. Entre los viajeros había varios representantes de Renfe que no quisieron perderse este viaje inaugural. El gerente de los servicios comerciales del norte, Alfonso Rodríguez, reiteró que estaban «muy contentos» de cómo había discurrido el viaje. «Se ve en los clientes. Era algo muy esperado. La campaña de precios promocionales ha tenido muy buena acogida». Dicha campaña comenzó hace apenas dos días, ofrece billetes por 20 euros y concluirá el 29 de febrero. Renfe ha vendido unos 3.000 billetes en sólo 36 horas, la mayoría para los fines de semana y fiestas navideñas. «Hay mucha gente y muchas expectativas. Estamos en una época vacacional, de ocio, turismo familiar. Hay fechas muy señaladas».

Sin embargo, la puesta en marcha de esta línea también suscita varias preguntas. La primera cuestión es qué sucederá con los precios cuando termine la campaña promocional y si influirá en la ocupación de los vagones. Según Rodríguez «estamos aplicando una política de precios dinámicos, para todos los públicos, con plazas promocionales» y la intención en el futuro es «seguir con la misma línea». El nuevo enlace con Madrid tiene capacidad para 282 personas y ayer traía a unos 50 pasajeros, aunque algunos ni siquiera sabían que viajaban en un tren de altas prestaciones y no en uno convencional.

Otra duda lógica es si la frecuencia de los viajes se mantendrá como hasta ahora. Actualmente hay tres conexiones rápidas de ida y vuelta (salidas a las 6:50, a las 15:30 y a las 18:20 horas. Los fines de semana el primer tren sale a las 8:45 horas) y otras ocho en trenes de media y larga distancia y trenhotel. Según el responsable de Renfe, la entidad ferroviaria «analiza la demanda en todas las líneas, el comportamiento de éstas, las encuestaas entre los pasajeros...» antes de plantearse cualquier modificación de las rutas o de los horarios. Así, es de suponer que Renfe estudiará qué tal funciona la nueva conexión y después la adaptará en función de lo que opinen los viajeros y de si la demanda justifica incorporar nuevas conexiones con la capital de España.

Así las cosas ¿puede ser rentable esta línea? «Depende. Hay que analizarlo todo: la frecuencia, el tipo de clientes, la política promocional, etcétera, pero aún estamos en los inicios del servicio y hay mucha ilusión tanto entre los clientes como en la compañía». Por lo pronto ayer se llevaron la enhorabuena de los primeros 50 viajeros.