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La Casa Museo de Unamuno ofreció ayer visitas guiadas.
«Ojalá hoy los políticos pudieran ser como él»

«Ojalá hoy los políticos pudieran ser como él»

redacción / word

Martes, 30 de septiembre 2014, 13:31

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Salamanca busca al Unamuno más humano, durante los actos de celebración del 150 aniversario de su nacimiento, y se vuelca con su rector más histórico, con el pensador más universal que la habitó, con su escritor más brillante. Precisamente ayer hace 150 años Miguel de Unamuno nació en Bilbao. Llegó a Salamanca, por primera vez, 27 años más tarde, un 12 de julio de 1891 para tomar posesión de la Cátedra de Lengua Griega, y en esta ciudad castellana murió, tras pasar varios años de destierro, el 31 de diciembre de 1936.

Unamuno ha sido considerado un «hombre clave» en la Universidad de Salamanca , como reconoce a Efe la directora de la Casa-Museo Unamuno, Ana Chaguaceda. Ahora, 150 años después de que naciera en la calle La Ronda, del viejo Bilbao, Salamanca sigue a la búsqueda de Unamuno. No han faltado los homenajes, los libros publicados, pero se «sigue buscando al Unamuno hombre», como apunta Chaguaceda, y como quedó demostrado ayer durante las visitas guiadas, gratuitas, a la Casa-Museo, junto al edificio antiguo de la Universidad.

Cientos de personas han querido meterse en la vida de don Miguel, como se le sigue denominando en la institución académica, pasear por las habitaciones de la vivienda que utilizó cuando fue rector, entre 1900 y 1914, cuando fue destituido por cuestiones políticas, y entre 1934 y 36, que fue cesado tras el incidente con Millán-Astray, al que le espetó la famosa frase: «venceréis, pero no convenceréis».

Unamuno siempre se consideró un salmantino más, un luchador por una ciudad de la que dijo, nada más llegar, que no le disgustaba, donde hay «unos soberbios edificios rodeados de casuchas tísicas y callejas anémicas». Y Salamanca se lo está devolviendo, con el «respeto» de sus ciudadanos, como señala Chaguaceda. Entre los visitantes que ayer pasaron por la habitaciones que utilizó el exrector, se oyó decir: «ojalá los políticos de hoy pudieran ser como fue Unamuno».

Según Chaguaceda, la imagen que hay del que fuera concejal en el Ayuntamiento de Salamanca y diputado en Cortes por esta provincia es de un hombre «íntegro y honesto», que luchó por la ciudad y por una ideología. Quizá se siga estudiando al político, al ensayista, al profesor, se sigan publicando libros sobre sus ideas religiosas, pero, según añade la directora de la Casa-Museo Unamuno, sigue despertando «interés entre los ciudadanos su personalidad».

Mientras Bilbao se vuelca con actos para honrar a Unamuno, Salamanca sigue a la búsqueda de ese pensador, que fue definido por Antonio Sánchez Barbudo como un «ateo que tenía el corazón católico» o el hombre que «vivió en crisis permanente», como dijo Etelvino González López. Y la Casa-Museo seguirá recibiendo a cientos de investigadores -una media de cinco diarios, según Chaguaceda- y miles de correos electrónicos para ampliar los estudios sobre Unamuno.

En Bilbao han iniciado también una serie de actos para conmemorar el 150º aniversario de su nacimiento. Ayer se inauguró una exposición y el próximo 28 de octubre, José Antonio Ereño, experto en la figura de Unamuno, conducirá el acto de presentación del libro Unamuno en la política local, elaborado por el historiador Francisco Blanco Prieto. Además se ha elaborado cun documental dirigido por Juan Carlos Sánchez Gómez, Enclaves de Unamuno , que propone un paseo por diferentes enclaves de la ciudad de Salamanca que albergaron sus últimos años, y que se presentará el 19 de diciembre en Bilbao. También se está rodando una película de Manuel Menchón que, después de pasar por Fuerteventura, llegará a Salamanca. Será a partir del 12 de octubre.

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