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Un recolector en la comarca de CiudadRodrigo en campañas pasadas.
Vaticinan una buena campaña micológica si persisten las lluvias

Vaticinan una buena campaña micológica si persisten las lluvias

Un total de 38 pueblos y más de 50.000 hectáreas están acogidos al programa de gestión Micocyl

Silvia G. Rojo

Jueves, 18 de septiembre 2014, 12:53

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A estas alturas del año los expertos se muestran cautos pero lo cierto es que la previsión para el año micológico «es muy buena si estas lluvias tienen continuidad», explica el experto en la materia, José Ignacio Gómez.

Las lluvias generalizadas de los últimos días hacen prever que en no demasiado tiempo aparezcan una cantidad de especies importante por lo que «con estas condiciones, lo normal sería una campaña buena», insiste el micólogo.

En el mundo de la micología algunas fechas son especialmente significativas y la feria de Salamanca suele ser un buen indicador. «La verdadera otoñada se da cuando llueve a mediados del mes de septiembre o cuando por San Mateo las lluvias son abundantes», argumenta, «y este año, eso está sucediendo por lo que solo nos queda agradecer y disfrutar el año que viene».

En zonas como Teruel o Cuenca, este año ha sido «espectacular» y aunque Gómez es de los que dice que «hay que esperar», también es de los que ya está saliendo al campo y ha encontrado alguna especie.

Con sus salidas al campo busca variedades que puedan despertar su interés para ser estudiadas y si bien es cierto que, una vez que llueve hay que esperar entre 15 y 20 días para que haya más variedad en el campo, advierte que «las variedades comestibles todavía tardarán más».

Mientras, los pueblos de la provincia siguen dándole forma a la gestión micológica, a las denominadas unidades que en el caso de la provincia de Salamanca se dividen en Sierras de Francia, Béjar y Quilamas y El Rebollar.

En esta ocasión, el programa que promueve la Diputación junto con 38 pueblos de la provincia salmantina y que afecta a más de 50.000 hectáreas de monte público, se denomina Micocyl y es la continuidad del anteriormente denominado Myas.

El Programa Micocyl tiene como finalidad la puesta en valor y gestión sostenible de los recursos micológicos. Una de las medidas principales que contempla es la regularización de la recolección de setas con el objetivo de garantizar su conservación.

Lunes para hablar de setas en el Centro Social Alternativo Aldea

  • La Sociedad Micológica de Ciudad Rodrigo retomará su actividad en fechas próximas con reuniones periódicas que se desarrollarán todos los lunes en el denominado Centro Social Alternativo Aldea, según ha confirmado el propio José Ignacio Gómez.

  • El micólogo participó recientemente en este centro dentro del ciclo '¿Qué está pasando con?' que tiene como objetivo entender y analizar los cambios que se están produciendo en la sociedad y el entorno.

  • En concreto, Gómez habló a los asistentes sobre cómo incide el cambio climático en las setas y hongos, una charla que supuso, de igual modo, el inicio de las actividades relacionadas con la micología en el centro.

  • La Sociedad Micológica de Ciudad Rodrigo tiene una trayectoria dilatada y sus reuniones son periódicas cada temporada, independientemente de que se haya ido cambiando el lugar de encuentro.

  • De manera habitual suelen, cada año, organizar una jornada para todos los interesados en este mundo en la que salen al campo a recolectar especies que luego se analizan y se exponen en los bajos del Ayuntamiento.

  • Precisamente, José Ignacio Gómez es una de las personas a las que más ayuda piden en estas fechas todas aquellas personas que tienen dudas, del tipo que sean, con las setas que han recolectado en sus salidas al campo.

La regulación micológica de los territorios de Castilla y León incorporados al proyecto está basada en la legislación vigente y se caracteriza por un sistema de permisos obligatorios y ofrece una serie de servicios al recolector. Los beneficios generados por este sistema repercuten directamente en la población local, los ayuntamientos, otras entidades propietarias de los montes y en la gestión sostenible de los recursos micológicos. Asimismo, este sistema proporciona una herramienta de actuación para regular y equilibrar la presión recolectora sobre los montes de la comunidad en función de las limitaciones de cada territorio.

El diputado del Organismo Autónomo de Empleo y Desarrollo Rural, José Prieto, manifiesta que «hemos entendido entre todos que ésta es la mejor forma de poner un poco de orden en la explotación; se trata de un recurso único y si no existe esa regulación, habrá más transgresiones».

En opinión de Prieto, este tipo de gestión del monte público, «va calando en la gente, lo van aceptando porque ven que la ordenación va a ser una realidad más pronto que tarde».

Por otra parte, la comercialización profesionalizada del recurso y el ecoturismo se vislumbran como las nuevas dimensiones y los retos que deben asumir programas de estas características. «Que todo el mundo conozca mejor, que sanitariamente esté bajo el paraguas de la tranquilidad y que se atraiga a los pueblos ese turismo que busca la micología», define Prieto como los objetivos de futuro.

Así, se contemplan distintas modalidades de recolectores, que pueden ser locales, provinciales, vinculados o foráneos, dependiendo del lugar en el que estén empadronados.

Las modalidades de permiso también son diversas y abarcan desde el permiso de fin de semana, el de temporada, el recreativo, el comercial o el científico.

Como es lógico, las condiciones son distintas y en un permiso recreativo se permite al titular recolectar desde un punto de vista lúdico un máximo de cinco kilogramos por día. Si ese titular quiere recolectar desde un punto de vista lucrativo, destinado a la comercialización, la cantidad máxima se ha fijado en 20 kilogramos/día. Los permisos científicos son gratuitos y permiten recolectar cualquier especie fúngica con fines científicos y serán expedidos directamente por y según las limitación que establezca la entidad gestora, que en este caso es Cesefor.

La pasada campaña se expidieron en la provincia de Salamanca 2.500 permisos de distintas modalidades para la recolección, el doble que el año anterior.

El precio, evidentemente varía en función de todo lo citado anteriormente por lo que puede oscilar entre los 400 euros de un permiso de temporada para uso comercial de un foráneo o los 5 euros de una licencia de fin de semana con fines recreativos, independientemente del lugar en el que se esté empadronado.

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