Un final destrozado por la lluvia

La esperanza, dicen, es lo último que se pierde. Al menos eso pensaban desde la estación de Valdesquí, donde tras un nefasto comienzo de campaña, estaban levantando cabeza con unas condiciones bastante buenas. Se podía decir que era el mejor centro para esquiar en el Sistema Central prácticamente durante todo el mes, algo que se agudizó con el cierre de La Pinilla y del Puerto de Navacerrada.

Era el momento esperado en la considerada Nieve de Madrid, pero la meteorología no ha perdonado. Las lluvias han caído durante toda la semana sobre sus pistas, avisando de las dificultades que se le venían encima, pero aun así reinaba la idea de que el fin de semana se podría volver a abrir.

Lejos de esa idea, parece que las tres jornadas de intensas precipitaciones han impedido que se retome la actividad en el centro madrileño, que ha visto como las lluvias unidas a las altas temperaturas registradas- han dejado al descubierto grandes calvas de tierra y nieve blanca completamente encharcada. Una situación que ha provocado el cierre de Valdesquí, que lamenta lo sucedido en un comunicado en su página web y agradece a todos el apoyo mostrado a lo largo de la temporada.

Irregular como pocas, ellos mismos la han calificado como una campaña muy extraña. Pero en el centro madrileño no quieren pensar en eso. El objetivo es preparar todo ya de cara a la próxima temporada, una época para la que se está trabajando desde ya. Las ganas y la ilusión siguen muy patentes en Valdesquí.

A pesar del balance claramente negativo que se ha registrado este año, pueden presumir de ser el complejo que más tarde ha cerrado sus puertas. Toca descansar y esperar que el próximo curso sea mucho mejor que el presente.