Destruyen la mayor parte de las esculturas con forma de P de la Calle Mayor

Ni una noche. Tenían razón aquellos artistas que reclamaban al Ayuntamiento algún tipo de vigilancia especial o que optaron por poner a buen recaudo sus creaciones. Tenían razón, porque la madrugada del primer día de fiesta ha resultado especialmente dolorosa por la actitud incívica de unos pocos, que como un ciclón han arrasado la Calle Mayor, destruyendo una docena de las escultóricas P de escayola que se habían colocado a lo largo de la principal arteria de la ciudad.

Solo ocho de las veinte esculturas, según confirmaban ayer los operarios municipales, han logrado sobrevivir a la primera noche de las fiestas de San Antolín. El resto han sido volcadas y golpeadas con tal saña que en algunos casos solo han quedado añicos que han tenido que ser retirados por los servicios de limpieza de Urbaser.

Algunas piezas con menos daños han sido recogidas, con el fin de intentar su restauración, con el objetivo de intentar volver a colocarlas.

Las que no han sido destruidas se han concentrado en un tramo más pequeño de la Calle Mayor, entre Barrio y Mier y Marqués de Albaida, con el fin de que palentinos y visitantes puedan seguir disfrutando de esta novedosa iniciativa, que comenzó como una de las grandes atracciones de las ferias y que se ha tornado en un inmensa desilusión. A las esculturas que permanecen se ha sumado esta mañana la decorada por el actor Moncho Borrajo.

Fuentes municipales han confirmado que algunos de los autores de los destrozos han sido ya identificados por la Policía Local.