La pérdida progresiva de matrículas hace peligrar el futuro del colegio Angélicas de San Pablo

Vivió unos años con unos niveles de matriculación por encima de la media cuando impartía el Bachillerato Unificado Polivalente (BUP) y el Curso de Orientación Universitaria (COU) de la ley educativa de 1970, unos estudios que hicieron que el colegio Angélicas de San Pablo se convirtiera en un referente en la oferta educativa de Palencia. Pero la desaparición de aquellas enseñanzas cuya última promoción salió de las aulas del colegio en el curso 2000-2001 por la aplicación de la Ley Orgánica General del Sistema Educativo (LOGSE) de 1990, supuso el comienzo de otra época menos boyante para el centro.

En esta última década, el colegio ha ido perdiendo matrículas progresivamente, de forma que en este curso apenas suma 74 alumnos entre Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y Bachillerato. Es más, de los cuatro alumnos que iban a comenzar los estudios de cuarto de Secundaria en este curso, la matrícula se quedó en uno. Las familias de tres de ellos creyeron más acertado que los estudiantes se matricularan en otro centro dada la singularidad que representaría que solo cuatro conformaran la clase. Por ello, al iniciarse el curso, la Dirección Provincial de Educación ha mediado para resolver la situación del estudiante que mantuvo su intención de seguir en el centro. El alumno de cuarto de ESO ha sido derivado al instituto Jorge Manrique, por lo que el colegio Angélicas de San Pablo ya no imparte este curso.

Se da la circunstancia de que entre primero y segundo de ESO el colegio suma una veintena de estudiantes y que en tercer curso están matriculados este año ocho alumnos, por lo que el colegio se encuentra en una situación de indefinición que hace temer por su cierre como centro educativo.

El colegio mantiene los conciertos para los dos cursos de Bachillerato de Letras que ofrece (con una decena de alumnos en primero y una veintena en segundo), de forma que es el único privado de la provincia de Palencia con financiación pública en estas enseñanzas no obligatorias, unos conciertos que arrastra desde la ley de 1970 y que constituyeron un fuerte atractivo para el centro antes de la puesta en marcha de la Logse.

Sin embargo, según han indicado fuentes de la Dirección Provincial de Educación, la decisión sobre la viabilidad del colegio compete exclusivamente a la Congregación de las Angélicas de San Pablo. No obstante, la dirección del colegio no ha querido pronunciarse sobre la situación que atraviesa ni sobre sus planes de futuro.

Será para el próximo plazo de preinscripción de alumnos para el curso 2015-2016 cuando el colegio, situado en el barrio del Cristo, tendrá que decidir si continúa funcionando como centro educativo.