PP y PSOE aprueban en el Congreso el pacto antiyihadista sin sumar ningún otro apoyo

El pacto antiyihadista promovido por el presidente del Gobierno y el líder del PSOE ha sido finalmente aprobado en el Congreso de los Diputados con los votos de PP y PSOE y el apoyo de los firmantes del texto. Es decir, los diputados de UPN, Foro Asturias y Coalición Canaria. El resto de la oposición ha mostrado su disconformidad con una reforma del Código Penal en materia de terrorismo que los grupos han calificado de hipócrita, oportunista, bipartidista y poco garantista. Los portavoces de las fuerzas políticas se han manifestado contra la inclusión de la prisión permanente revisable en el régimen punitivo, pero no sólo en ese punto se producen las discrepancias. Por ejemplo, la ampliación desmesurada de lo que se entiende por delito de terrorismo ha llevado finalmente a CIU a decantarse por no respaldar el texto tras la ruptura del voto que el grupo sufrió la semana pasada en el debate de toma en consideración. Sólo una de sus enmiendas ha sido aceptada y la coalición ha optado por abstenerse, exactamente igual que UPyD.

Cualquier acto grave contra la vida, la libertad o el patrimonio que tenga como objetivo subvertir el orden constitucional u obligar a los poderes públicos a realizar un acto o abstenerse de hacerlo será castigado según lo que se contempla en este apartado del Código Penal. Y la enmienda que el Ejecutivo y los socialistas introdujeron en el último momento aclarando que los desórdenes públicos sólo serán considerados delitos de terrorismo cuando sean cometidos por terroristas, no ha terminado de arrancar nuevos apoyos. Los grupos han rechazado tanto el fondo como las formas. La vía de urgencia y por lectura única elegida por el Gobierno impide el respaldo a unos puntos y el rechazo de otros. La modificación se vota en su conjunto y las prisas no se entienden en la oposición.

Los portavoces han denunciado la ausencia de un debate sosegado y profundo que garantice la seguridad jurídica de la reforma. Son unos auténticos irresponsables, ha espetado la representante del UPyD, Rosa Díez, que teme que los cambios sean utilizados por los abogados de los terroristas para obtener ventajas para sus representados. También el diputado del PNV, Emilio Olabarria, detecta que al PSOE le han movido los "réditos electorales" y descarta el argumento de que la prisión permanente revisable se retirará cuando los socialistas gobiernen porque no saben cuándo ganarán las elecciones. El mismo planteamiento ha suscrito ERC, mientras que la Izquierda Plural cree que el PP siempre se guía por la venganza.

PP y PSOE, unidos

Los populares, por su parte, no se explican cómo estando contra el terrorismo se puede no llegar a respaldar un acuerdo como este. Hemos dialogado con todos los grupos, ha reivindicado Rafa Hernando. El portavoz parlamentario del PP interpreta que su partido y el PSOE han eliminado de manera generosa los intereses partidistas y recuerda que el Consejo Europeo ha designado a España y Francia ponentes en la búsqueda de una estrategia global contra el terrorismo, lo que a su juicio convierte el pacto sobre el Código Penal en un modelo de referencia.

En pie se han puesto también los diputados del grupo parlamentario socialista para aplaudir la intervención de Antonio Hernando. El representante del PSOE ha justificado su respaldo a la reforma. Somos la izquierda -ha defendido- que quiere responsabilizarse de las cosas importantes del Gobierno de España, estemos en la oposición o en el Gobierno. Hernando ha reiterado que el fenómeno del terrorismo yihadista ya no presenta las mismas características que cuando España sufrió el atentado del 11-M. No habíamos visto hasta ahora, ha subrayado, degollamientos masivos en las playas, ni cortar cuellos de terroristas ni quemar vivos a los rehenes. Por todo, ha concluido su discurso zanjando el debate sobre su firma junto al PP. Estoy absolutamente convencido de que todos compartimos el sí a la libertad y el no contra el terrorismo y con eso a mi grupo hoy le basta.