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Miguel Frechilla, director general de Industrias Maxi.
Industrias MAXI logra la certificación para fabricar piezas aeroespaciales

Industrias MAXI logra la certificación para fabricar piezas aeroespaciales

La compañía vallisoletana, que contaba con certificación para la producción de utillaje para la industria aeronáutica y que trabaja también para el sector de la automoción, podrá ahora desarrollar productos que se montan directamente en las aeronaves con lo que espera abrir una nueva línea de negocio

Julio G. Calzada

Miércoles, 14 de enero 2015, 19:14

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Industrias MAXI, compañía ubicada en Valladolid, ha logrado la certificación en la UNE-EN 9100, la norma reconocida internacionalmente para avalar el sistema de gestión de calidad aeroespacial, que agrupa a los principales fabricantes del sector a nivel mundial y que permitirá a esta empresa la fabricación de piezas para aeronaves. «El objetivo que persigue Industrias MAXI con esta certificación es convertirse en una entidad de referencia en la ejecución de trabajos orientados a aumentar la calidad, la fiabilidad y la seguridad de los productos aeroespaciales», explica la compañía radicada en la calle Nitrógeno del polígono El Carrascal.

La consecución de dicha certificación se encuadra dentro de una estrategia definida hace años por esta compañía, que tiene como director general a Miguel Frechilla, para introducirse en el sector de pieza metálica 'avionable', es decir, aquellas que se montan directamente en los aviones. «Operamos desde hace veinte años en el sector aeronáutico como suministradores de utillaje de los principales proveedores denominados con la calificación de 'Tier 1', por tanto de primer nivel. Esta certificación nos permite no solo hacer utillaje aeronáutico, sino proveer de piezas que se montan en los aviones. Supondrá la fabricación seriada de piezas, por lo que confiamos que lleve asociado una nueva línea de negocio y una mayor carga de trabajo», explica Frechilla.

La norma UNE EN 9100, basada en la norma ISO 9001, es uno de los requisitos exigidos por las organizaciones de la industria aeronáutica a sus proveedores y pone un especial énfasis en el cumplimiento con estándares de calidad, seguridad y tecnología en todas las disciplinas de la industria, y a lo largo de toda la cadena de suministro, cubre así todos los aspectos relacionados con el diseño, la producción y la distribución de piezas.

«El alcance de esta nueva certificación avala a Industrias MAXI en la producción partes metálicas para el sector aeronáutico y espacial», precisa Miguel Frechilla. Esta acreditación se suma a las ya obtenidas por Industrias MAXI para garantizar sus sistemas de gestión de la calidad (ISO 9001), medio ambiente (ISO 14001).

Crecimiento

Los principales sectores de actividad de esta empresa vallisoletana son el automóvil y la aeronáutica, además de trabajar para un gran espectro de empresas del sector industrial. «Nuestro aporte de valor varía en función de los distintos proyectos: desde el mecanizado de piezas de precisión hasta el diseño, fabricación, montaje y puesta a punto de máquinas especiales e islas robotizadas. Nuestra cadena de valor está compuesta por: Ingeniería (mecánica y automática), Soldadura, Mecanizado, Montaje y Metrología», enumera el director general de Industrias MAXI, quien destaca como «por cuarto año consecutivo la compañía ha cerrado el ejercicio con incremento del volumen de ventas», si bien, apunta, las cifras todavía no son oficiales y se harán públicas en unos días. «La previsión continúa siendo de crecimiento en cifras y también en empleo», adelanta Frechilla.

Constituida en 1969 como Talleres MAXI centrada en la actividad del mecanizado para el sector del automóvil y las artes gráficas, la empresa evolucionó en el año 1986 con la creación de Industrias MAXI S. A. y la puesta en marcha de una oficina técnica. Dos años más tarde, en 1988, la empresa se introdujo en el sector aeronáutico como proveedora de utillaje y de moldes. En el año 2007 la empresa se embarcó en un plan de inversión por un montante total de ocho millones de euros en maquinaria de Mecanizado y Metrología y en 2008 se trasladó a la nueva sede del polígono de El Carrascal al tiempo que se introdujo en dos nuevos sectores: el eólico y el ferroviario. En 2010, en plena crisis económica, la compañía inició un plan de empleo con el fortalecimiento de sus departamentos de Ingeniería y de Montaje.

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