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Fernando Alonso, en el circuito de Montmeló en 2013.
Cuando la Fórmula Uno es lo de menos

Cuando la Fórmula Uno es lo de menos

El GP de España, que se celebra este fin de semana en Montmeló, se convierte en una de las ferias itinerantes de contactos comerciales más importante del mundo

Javier Varela

Miércoles, 7 de mayo 2014, 02:19

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Los monoplaza del Mundial de Fórmula Uno no será lo único que se pueda ver -y escuchar- en el GP de España que se celebra este fin de semana en el Circuito de Montmeló. Aviones privados, helicópteros, famosos, personalidades, presidentes de grandes empresas, deportistas Los pilotos y la carrera en sí pasan a un segundo plano para los que no son 'aficionados' a la Fórmula Uno, pero sí ven la carrera como una posibilidad de cerrar un negocio, iniciarlo o simplemente disfrutar del espectáculo rodeado de gente VIP.

Aunque los vacas flacas también han afectado al Circuito de Catalunya y al GP de España, los niveles de venta de entradas -que van desde los 130 euros en Pelouse a los 495 euros de la Tribuna Principal cubierta alta por persona y los tres días- son similares a las del año pasado, aunque esperan aumentar la cifra final. Recuperamos un mercado difícil a base de mucha aportación de extranjeros, un 56% de ellos son los que han comprado las entradas. Es el futuro, consolidar el GP en el extranjero, reconoce Vicente Aguilera, presidente del Circuito. "Esperamos llegar a las 94.000 el día de la carrera", señalan desde el cicruito.

Otra cosa es para los VIP. Ahí, aunque no lo parezca, también hay categorías. El circuito comercializa unas entradas denominadas 'Suite Gold VIP' -incluye entrada de tribuna para los 3 días incluyendo pases de catering para 2- al precio de 1403,60 euros y la 'VIP Plata Marquee' -que incluye la entrada de tribuna para los 3 días incluyendo pases de catering para 2- por 'sólo' 928,00 euros. Un lujo para algunas empresas que siguen estando un escalón más debajo de los gigantes.

La 'créme de la créme' se encuentra en los palcos situados en la planta superior de la tribuna de la recta principal -zona reservada para los invitados VIP de los principales patrocinadores-. Un coto privado en el que disfrutar de la carrera, de los Ferrari, de los Mercedes, de los Red Bull, dejarse ser agasajado con comida y bebida, poder hacerte alguna foto con un piloto y poner los cimientos a futuros negocios de cientos de millones de euros. Un lujo al alcance de muy pocos que ronda los 4000 euros por persona (nadie ofrece cifras oficiales) y que demuestran que el GP de España es una de las ferias itinerantes de contactos comerciales más importante del mundo.

Llegar en helicóptero

Un lujo que se completa con la forma de llegar al Circuito de Montmeló. Hacerlo en coche, como la mayoría de los mortales, no tiene el mismo glamour que hacerlo por el aire. Para los VIP está reservado llegar al GP por el cielo. El helipuerto para pasajeros del circuito es una de las instalaciones más grandes de España en su tipo, con capacidad para 8 helicópteros y el lugar por el que pasan buena parte de los VIP. Aunque las compañías operadoras que ofrecen estos servicios guardan silencio sobre la identidad de sus clientes (mayoritariamente españoles, franceses, británicos y suizos), sí se sabe que los precios de este 'lujo' rondan los 900 euros por persona (el año pasado hubo 77 vuelos privados en el Circuit). Aunque la crisis se ha dejado sentir también para los más poderosos y desde una de estas operadoras aseguran que "ha bajado la petición de viajes en helicóptero con respecto a años anteriores".

Un fin de semana de lujo y glamour que se completa con la estancia en los mejores hoteles de la Ciudad Condal -que desde hace semanas han colgado el cartel de completo- la visita a los mejores restaurantes, a las tiendas exclusivas y, si queda tiempo, a los lugares más emblemáticos de la ciudad. Eso sí, siempre que tengas un buen puñado de euros en el bolsillo.

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